Dos detenidos lograron escapar de la alcaidía de la Comisaría Vecinal 12 C de la Policía de la Ciudad, en el barrio de Villa Urquiza. Según fuentes policiales, los prófugos idearon un plan meticuloso: limaron los barrotes de una ventana y se fugaron sin ser detectados.

El escape fue descubierto este lunes durante el conteo matutino, cuando se constató la ausencia de ambos detenidos y se observaron evidencias claras de violencia en la reja. Este modus operandi revela una preocupante vulnerabilidad en la seguridad de las dependencias policiales de la Ciudad de Buenos Aires.

Uno de los prófugos fue identificado como Héctor Fernando Montoro, de 37 años, detenido a fines del año pasado por el delito de robo y se encontraba bajo prisión preventiva en la Comisaría Vecinal 12 C. El otro es Javier Mauricio García, de 35 años, arrestado por portación de arma de fuego y a la espera de resolución judicial.

Este incidente representa la cuarta fuga de detenidos en la Ciudad en un lapso de quince días. La primera evasión ocurrió el domingo de Pascuas en la Alcaidía Número 1 de la Policía de la Ciudad, ubicada en el barrio de San Telmo. Posteriormente, apenas horas después de este hecho, dos detenidos se escaparon de la alcaldía 3 del barrio de Balvanera tras cortar la reja de uno de los calabozos. Una semana después, se conoció que otros cuatro presos se fugaron de la Comisaría Vecinal 6 B de la Policía de la Ciudad, ubicada en Caballito, de los cuales dos fueron recapturados.

Este evento llevó a un despliegue intensivo del personal policial en la zona de Villa Urquiza, con el fin de recapturar a los evadidos y reforzar las medidas de seguridad en las comisarías afectadas. Ahora, la Comisaría Vecinal 12 C, ubicada en la calle Juramento al 4367, se encuentra bajo revisión de sus protocolos de seguridad, con el objetivo de identificar posibles fallos y fortalecer su capacidad para prevenir futuras fugas.

Se espera que en los próximos días se intensifiquen los operativos de búsqueda y se implementen medidas adicionales para garantizar la seguridad y la integridad de los detenidos bajo custodia policial en la Ciudad de Buenos Aires.