Después de que el Congreso haya aprobado la reforma de movilidad jubilatoria y el Gobierno nacional anuncie el veto total de la ley, agrupaciones de izquierda y jubilados marcharon en los alrededores del Palacio Legislativo y hacia Plaza de Mayo.
La Policía Federal intentó dispersar la manifestación y hacer cumplir el protocolo anti-piquete impulsado por la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich; aunque sin éxito, ya que todo terminó en incidentes.
Además de la participación de jubilados que se ven afectados por el veto que anunció la administración de Milei, los movimientos de izquierda y sociales se sumaron en paralelo a la movilización. Allí hubo empujones y alta tensión, a lo que los efectivos respondieron con gas pimienta para evitar el corte de Avenida Rivadavia.
La Unión de Trabajadores Jubilados en Lucha (UTJL) fue la agrupación que llamó a la movilización: “Esto es una vergüenza. Somos trabajadores, toda la vida hemos trabajado. Ahora este ladrón de Presidente dice que el país se va a fundir porque nos da un miserable aumento de $20.000″, dijo uno de los jubilados que participaron de la marcha.
«¿Quién puede creer esa barbaridad? ¿Quién puede vivir con $10.000 por día, si tenemos que comer y comprarnos remedios?”, agregó.
En el comunicado de la organización convocante, se expresó: “Jubilados junto con sindicatos, agrupaciones, piqueteros, estudiantes y asambleas rechazamos el veto y exigimos la recomposición de lo perdido durante los gobiernos de Macri, de Fernández y de Milei. También la movilidad automática por sueldos e inflación, los medicamentos y transporte gratis y restitución de la tarjeta alimentaria”.
