El fiscal federal Diego Luciani reveló que durante el juicio en el que le tocó acusar a Cristina Kirchner en la causa Vialidad sufrió “presiones inconcebibles” del expresidente Alberto Fernández.
Además, Luciani señaló que tuvo que enfrentar “operaciones mediáticas” y dijo que los medios kirchneristas lo hostigaban.
En una charla en el Colegio Público de Abogados de la Capital Federal, organizada por Transparencia Internacional y Poder Ciudadano, el fiscal afirmó que las presiones se extendieron a su par, Sergio Mola, con quien llevó adelante la acusación en el juicio, y también a sus familiares.
“Padecimos intromisiones inconcebibles por parte del presidente de la Nación, de sus ministros, de sus funcionarios, en especial durante los alegatos. Yo, mi familia, el doctor Mola, fuimos sometidos a operaciones mediáticas tendientes a desestabilizarnos y, justamente, amedrentarnos”, aseguró Luciani.
El rol de la prensa
El fiscal federal, cuyo alegato fue tomado como base para la condena a Cristina Kirchner a seis años de prisión, dijo que ese “hostigamiento” tuvo su origen en “los medios de comunicación colonizados por la corrupción”.
“El mismo presidente de la Nación, dos días después de terminado nuestro alegato, dijo ‘Nisman se suicidó. Yo espero que Luciani no se suicide’. Mis hijas estaban mirando la televisión en ese momento. La hipótesis investigativa es que a Alberto Nisman lo mataron”, recordó Luciani.
Reiteró parte de los conceptos que usó al alegar en el juicio. Afirmó que “la corrupción es un grave atentado contra la democracia y, principalmente, contra los derechos humanos, ya que desapodera de recursos públicos a sectores vulnerables, para enriquecer a los corruptos y a los amigos del poder”.
“Juzgar al poder mientras se está en el poder es un trabajo titánico, de mucho esfuerzo, que pone a prueba nuestra fortaleza mental, nuestras convicciones y nuestras propias limitaciones. Nosotros padecimos, casi en soledad, situaciones impensadas en democracia”, sostuvo.