Un violento accidente en la costanera de Rosario dejó un saldo trágico: Tania Gandolfi, de 41 años, y su hija Agustina García, de 16, murieron tras ser atropelladas por un auto conducido por Agustín López, de 20 años.

La conmoción se intensificó por el testimonio de un testigo que relató el desgarrador momento en que Diego García, esposo y padre de las víctimas, enfrentó al conductor: “Me dejaste sin hija”, fueron las palabras que, según Federico, el testigo, Diego García le gritó a López mientras intentaba golpearlo.

“Un policía tuvo que intervenir para evitar que lo matara”, añadió.

El accidente y sus consecuencias

El choque ocurrió en el cruce de las avenidas Wheelwright y Presidente Roca, donde, según las investigaciones preliminares, López habría estado participando en una picada. El auto que conducía salió del túnel Illia a una velocidad de 120 kilómetros por hora y no mostró signos de haber frenado antes del impacto.

En el lugar fallecieron, casi al instante, Tania Gandolfi y Agustina García. Diego García sufrió heridas leves, mientras que su hija menor, Victoria, de 6 años, permanece internada en el Hospital de Niños Víctor J. Vilela, donde se recupera favorablemente.

El relato de un testigo clave

Federico, quien estaba cerca del lugar, describió el momento con estremecimiento: “Fue impresionante. El padre estaba desconsolado, abrazaba a un policía mientras lloraba y repetía: ‘Me dejaste sin hija’”.

El testigo también señaló que López parecía aturdido tras el accidente y que recibió varios golpes por parte del padre de las víctimas antes de que la policía interviniera.

Pruebas que complican al conductor

La investigación revela datos contundentes: no se hallaron huellas de frenado en el lugar, y el lector de velocidad marcó 120 km/h al salir del túnel. Estas evidencias refuerzan la hipótesis de que López participaba en una carrera ilegal.

La tragedia, además de cobrar dos vidas, deja una familia destrozada y evidencia el peligro de conductas temerarias en las calles.