Un nuevo ataque informático generó polémica este martes por la mañana, luego de que la página web del diario Perfil fuera hackeada y reemplazada por una imagen del DNI del presidente argentino, Javier Milei, junto a mensajes antisemitas. El hackeo ocurrió cerca de las 10 de la mañana y el sitio estuvo varios minutos fuera de servicio.
El atacante se identificó como “Gov.Eth”, el mismo hacker que meses atrás había vulnerado la página de Mi Argentina y el sitio oficial del Gobierno. En esta oportunidad, realizó un “defacement” (desfiguramiento), una técnica que consiste en modificar por completo el contenido original de un sitio web.
Durante el ataque, los lectores que ingresaban a la web de Perfil se encontraban con una foto del DNI de Milei, tomada de los registros del RENAPER, en lugar de las noticias habituales. A su vez, aparecían frases y mensajes discriminatorios vinculados al antisemitismo, lo que generó repudio y preocupación.
El equipo técnico del medio logró recuperar el control del sitio cerca de las 11 de la mañana, tras más de una hora de trabajo para restaurar la página y eliminar las imágenes y mensajes publicados por el hacker.
Este ataque se suma a otros hechos similares protagonizados por el mismo autor. En diciembre pasado, el mismo hacker había vulnerado la web del Gobierno nacional y había publicado un video junto a un mensaje que recordaba intrusiones informáticas anteriores. En ese momento, aclaró que no se trataba de un ataque político, sino de una acción realizada “por diversión”.
El método que utilizaron los hackers para acceder al DNI de Javier Milei
Según explicó en entrevistas posteriores, el acceso a estos sitios fue posible gracias a fallas básicas de seguridad, como la ausencia de verificación en dos pasos (conocida como segundo factor de autenticación). Esto le permitió ingresar a los servidores mediante claves filtradas en sitios de prueba y tomar control de las páginas oficiales.
El ataque de este martes vuelve a poner en el centro del debate la vulnerabilidad de los sistemas informáticos estatales y de medios de comunicación, así como la importancia de implementar medidas de seguridad más estrictas para proteger datos sensibles y evitar filtraciones de información personal.