Mientras cumplía sus años de prisión, ayer murió el israelí Nicolás Gil Pereg, mejor conocido como el “hombre gato” tras sufrir una descompensación. En 2021, había sido condenado a prisión perpetua por el doble homicidio de su madre, Pyrhia Saroussy, y su tía, Lily Pereg, en Mendoza.

Según informó la Policía, el “hombre gato” fue encontrado inconsciente en la Sala de Internación  Nº 3 de la Alcaldía V, que se encuentra en el Hospital El Sauce, donde estaba alojado. Los médicos trataron de reanimarlo con maniobras de RCP, pero no tuvieron éxito. 

Quién era el “hombre gato” y por qué lo llamaban así

Nicolás Gil Pereg, de origen israelí, era exmilitar e ingeniero y llegó a Mendoza en 2009 y, si bien vivía en un hogar muy precoz, contaba con una gran fortuna. Tenía patologías psiquiátricas que fueron constatdas durante la investigación por el doble homicidio. Gil Pereg aseguraba que era un gato, y durante las audiencias maullaba por lagros ratos.

En prisión, “hombre gato” estuvo en pareja durante un tiempo con una mujer llamada Verónica, con quien compartía su pasión por los gatos. En cuanto a su tiempo en prisión, estaba cumpliendo 5 años y 5 meses detenidos. 

Por qué condenaron al “hombre gato”

En enero de 2019, la madre y tía del imputado fueron a Mendoza a visitarlo a su casa, que estaba llenda de gatos y perros en estado de abandono. La última vez que fueron vistas con vida fue el 12 de enero en ese domicilio. 

Dos semanas después, la Policía Científica halló sus cuerpos mutilados y tapados con tierra y piedras en un sector de la casa. Luego de ser descubierto, detuvieron a Gil Pereg y empezó a hacer comportamientos extraños. Siempre aseguró ser “un gato”. 

“Ella está viva, no sé qué encontraron o no. Yo sé que está viva”, había dicho Nicolás en cuanto a su madre en el último juicio que lo condenó. Y agregó: “Es mi vida. Jamás podría vivir sin madre. Yo vivía gracias a ella. Ella me enviaba dinero para poder sobrevivir. No tengo cómo vivir sin ella”. Sin embargo, la Justicia lo declaró culpable y condenó a cadena perpetua. 

Hasta el momento, no se encontró ninguna señal de violencia en el cuerpo de Gil Pereg pero la  autopsia será clave para saber la causa de muerte.