Tras darse a conocer los chats de un grupo de alumnos que pretendía realizar una masacre en una escuela de Ingeniero Maschwitz, ahora estudiantes de otro establecimiento educativo estaban organizando un hecho similar.
Tal como sucedió días atrás, la filtración de chats de un grupo de Whatsapp y la intervención de la justicia evitaron lo que podría haber sido una masacre en una escuela bonaerense.
Los hechos tuvieron lugar en la escuela Fray Luis Beltrán de la localidad ubicada a 75 kilómetros al norte de la ciudad de Buenos Aires.
El hecho fue descubierto por el padre un alumno que entregó las pruebas a la justicia luego de que su hijo le pasara una serie de capturas de pantalla con los detalles del plan.
Los mensajes eran explícitos y podían leerse amenazas como “el que va a arrugar que se salga ya y más vale que no diga nada, porque tiro en la frente”.
Las intimidaciones también incluían a las familias de los alumnos que decidieran contar lo que estaban pergeñando.
El antecedente de Ingeniero Maschwitz
Unos días atrás, estudiantes de la escuela N°4 de esa localidad del partido de Escobar creó un grupo denominado “Tiroteo Escolar”, que estaba comandado por una adolescente.
El objetivo era similar, realizar una masacre dentro del establecimiento educativo, pero el plan se frustró al ser descubierto por un grupo de padres.
En el caso de Ingeniero Maschwitz, se pudo determinar que el grupo estaba integrado por 10 alumnos.
Tras difundirse la noticia, la justicia allanó el domicilio de la menor, pero no encontró armas, aunque ordenó a los organizadores del grupo no acercarse a la escuela en un radio de 100 metros.
Asimismo, dispuso que los adolescentes no pierdan su año escolar, por lo que debieron implementar clases virtuales o tutorías para que puedan continuar con sus estudios durante el resto del ciclo lectivo.