Hoy, 21 de noviembre, se conmemora en la Argentina el Día de la Enfermería, como forma de homenajear a los las trabajadoras de la salud que cuidan a los pacientes durante su convalecencia y brindan asistencia sanitaria en diferentes ámbitos. ¿Pero por qué se celebra hoy? En el resto del mundo se celebra el 12 de mayo, día que coincide con el nacimiento de Florence Nightingale, la italiana que es considerada como la fundadora de la enfermería moderna. Sin embargo, en Argentina se se eligió el 21 de noviembre por ser el aniversario de la creación de la Federación de Asociaciones de Profesionales Católicas de Enfermería.
Sucede que en la Argentina del siglo XVIII, el 21 de noviembre se celebraba una procesión por las calles céntricas, que culminaban con una misa en honor a la Virgen de los Remedios, de la cual las enfermeras participaban activamente. En 1935 se conforma la Federación de Asociaciones Profesionales Católicas de Enfermería, que tomó como patrona de la institución a “Nuestra Señora de los Remedios”, la cual se considera la vírgen protectora de dicha profesión.
Durante la década del 30, y sobre todo durante los años 40 y 50 se da en Argentina un proceso de industrialización que coincide con procesos similares en el resto de América Latina. Con Europa en guerra y la necesidad de sustituir importaciones, el Estado comienza a impulsar un fomento de la actividad industrial que incorpora a grandes masas de obreros, que requerían que se los pudiera asistir y brindarles atención médica. Esto supuso una gran expansión del oficio de enfermería, y en 1953 la Asociación de Enfermería de la Capital Federal y la Asociación Católica de Enfermeras logran que se instituye formalmente, a través de la resolución ministerial N° 31397, el día 21 de noviembre como el Día Nacional de la Enfermería Argentina.
Según la Cámara Argentina de Especialidades Medicinales (CAME) de acuerdo a los datos del 2019 del Sistema de Información Sanitario Argentino (SISA), dependiente del Ministerio de Salud, actualmente hay en nuestro país aproximadamente 179.170 enfermeros matriculados, de los cuales 19.730 son licenciados, 73.373 son técnicos y 86.073, auxiliares (estos últimos constituyen el cincuenta por ciento del plantel general). Según la entidad, Argentina tiene una de las cantidades más bajas de enfermeros por habitante de las Américas (4,24 por cada diez mil personas), y “solo se ubican por debajo de ella Honduras, República Dominicana y Haití. En los Estados Unidos y Canadá, por ejemplo, la relación es 111 y 106 enfermeros por cada diez mil personas, muy lejos de la realidad local”.