La jueza Norma Abate de Mazzucchelli, presidenta de la Cámara Cuarta en lo Civil, Comercial y de Minas de La Rioja, y vicepresidenta de la Asociación de Mujeres Jueces de Argentina, renunció a su cargo luego de ser denunciada por una comerciante por pedir $8 millones para agilizar una sucesión.
La noticia se dio a conocer en el programa Telenoche Investiga, donde se narró el caso en el que Manuela Saavedra denunció a la abogada luego de que esta le pidiera esa suma para liberar un pago de la herencia de su tío, el cual falleció cuatro años atrás.
Frente a lo descubierto, Mazzuchelli presentó la renuncia a su cargo como jueza de la Cámara Cuarta en lo Civil, Comercial y de Minas de la provincia.
Fue tal el escándalo que se generó, que el gobernador de La Rioja, Ricardo Quintela, realizó un comunicado alusivo a través de su cuenta de X (Antes Twitter): “Los hechos acontecidos y denunciados públicamente son inaceptables y de una gravedad absoluta. La jueza Abate de Mazzuchelli, apuntada por pedir coimas para resolver distintos casos, está atentando contra la confianza del pueblo riojano en la Justicia; por ello, solicité la separación de su cargo y la investigación de esta situación”, manifestó.
Entre las pruebas que trascendieron en la columna noticiosa están la declaración de la víctima y un video obtenido de una cámara oculta de cómo la jueza le pide la plata.
En el comienzo de la nota una periodista se acercó a Mazzucchelli y le preguntó sobre el caso, a lo que la jueza respondió con patria pregunta: “Desconozco eso. ¿Cuál denuncia?”.
En cuanto a la denunciante, ella relató que todo comenzó cuando la letrada le contó que conocía a su tío: “Me dijo que como lo conocía me iba a hacer una excepción y que me iba a ayudar a sacarlo rápidamente”, dijo Saavedra, y destacó: “En un momento me dice que el sueldo de jueza era muy poco y que por eso no se interesaba en las causas”.
Un día, la jueza se acercó a su lugar de trabajo.“Me apartó a un costado y me dijo que para el otro día podía tener resuelto el tema, pero que eso tenía un costo porque era mucho trabajo”, contó Saavedra.
“Al otro día viene una señora que dijo que trabaja con ella y que ya estaban los papeles para empezar el trámite”, continuó, y luego detalló: “Volví a su despacho y ahí las cosas cambiaron. Me explicó que iba a regular unos honorarios de 8 millones de pesos, pero que en realidad iban a ser para ella”.
Mientras Saavedra registraba todo con una cámara oculta, Mazzucchelli procedía a intentar sobornarla. “Ahí le dije ‘ocho millones me va a cobrar, yo no puedo pagara eso’. Después ella tachó el número que escribió en una libreta y abajo escribió un cinco. Ahí le dije que era imposible porque estaba llena de deudas”.
“Si no queres hacerlo o no podes no lo hagas. Esto no es por obligación, es por reconocimiento.¿Quién te hizo todo? ¿Quién te manejó todo? Acá no fueron los abogados”, le dijo la acusada y remató: “Es simple Manuela, acá nadie te va a poner un revolver en el pecho. Entonces ¿cuánto me podes pagar?”.