El exagente de la SIDE, Julio César Pose, es juzgado vía zoom por organizar un falso operativo narco con ayuda de la DEA en el año 2003. La investigación la lleva adelante el Tribunal Oral Federal N° 1 de la Ciudad de Buenos Aires. De acuerdo con el expediente, el operativo «Flor de Acero» tenía el objetivo de «impulsar», «solventar» y «premiar» procedimientos antidrogas en la Argentina.
El caso
El 29 de diciembre de 2003, Arthur Staples, agente de la DEA, informó a Gendarmería Nacional que encontrarían un auto lleno de cocaína dos días después en la Avenida Figueroa Alcorta y Austria, ciudad de Buenos Aires, barrio de Recoleta.
Cuando llegó el Día D, Gendarmería Nacional hizo su trabajo: emboscó un auto particular y un taxi a la altura de «Floralis Genérica», la escultura que está a metros de la Facultad de Derecho, y les secuestró 44,2 kilogramos de cocaína dispuestos en 51 paquetes, según cuenta Clarín.
Resultó ser que entre los presuntos narcos se encontraba Pose, que logró escaparse con la ayuda de su principal colaborador, Abraham «René» Tenembaum, exactor del show televisivo «Titanes en el Ring». Según revela Clarín, Pose trabajaba de manera freelance para la embajada de los Estados Unidos.
En su indagatoria ante los jueces Ricardo Basílico, José Michilini y Adrian Grünberg, del TOF1, Pose reveló: «Llegamos al lugar, le pagué al taxista y le dije a los ocupantes del Ford Escort (donde estaban los 44 kilos) que esperen allí, que abran el capot del auto, que yo iba a buscar el dinero. Enfrente a Rond Point estaba estacionado el BMW de la embajada, que me estaba esperando. En el auto estaban Staples y René Tenenbaum. De ahí fuimos a la embajada de Estados Unidos».
El fallecido juez federal Claudio Bonadio, quien estaba a cargo del caso, le había dictado falta de mérito. Ahora, la Cámara Federal lo procesó al considerar que no había ninguna orden judicial que «lo autorizara a introducirse en un grupo sospechoso otorgándole facultades para desarrollar acciones relacionadas con el narcotráfico».
Pose, «La Morsa»
Julio César Pose era amigo de Sebastián Forza, Damián Ferrón y Leopoldo Bina, víctimas del Triple Crimen de General Rodríguez que tuvo lugar en agosto de 2008. Según numerosas fuentes, Pose lleva el apodo de «La Morsa», que se le atribuyó en octubre de 2015 al por entonces candidato a gobernador provincial Aníbal Fernández, para incriminarlo por el tráfico de efedrina.
El testimonio que sustentaba dicha asociación entre La Morsa y el exjefe de Gabinete, lo brindó entonces el convicto Martín Lanatta, condenado por el crimen, y que meses después se fugó de la cárcel de General Alvear junto con su hermano Christian y Víctor Schillaci.
