Desde la llegada de las primeras dosis de la vacuna Sputnik V el 24 de diciembre, el Gobierno y las provincias planearon lo que se dio a llamar “la campaña de vacunación más grande de la historia”, pero en la actualidad el ritmo no es el esperado y a pesar de que se consiguieron dosis, la logística de aplicación es despareja y muy lenta en muchos lugares del país.
La Ciudad de Buenos Aires es quien lidera las vacunas aplicadas en base a su población pero también la más beneficiada: actualmente cuenta con dosis para inocular al 9% de sus habitantes, un porcentaje muy por arriba del resto del país. La explicación que dan desde CABA es que por la cantidad de personal de salud que poseen (superior a otros distritos) y la edad elevada de su población, necesitan más dosis.
“La Ciudad tiene una carga de trabajadores de salud muy superior a otras regiones de la Argentina, y tiene una pirámide poblacional más envejecida del promedio”, aseguró el ministro de Salud porteño, Fernán Quirós hace algunos días para justificar la cantidad de dosis que le suministró el Gobierno Nacional.
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La Provincia de Buenos Aires recibió el mayor cargamento y también es el distrito que más dosis aplicó en números totales, pero en relación a la cantidad de habitantes que tiene, viene atrasada en relación a la Ciudad y La Pampa. El territorio que gobierna Axel Kicillof ya recibió más de 1.100.000 dosis de las cuales aplicó 800.000 pero en su Sala de Situación no distingue cuántos son efectores de salud, adultos mayores y docentes.
A nivel nacional, de las casi dos millones de dosis aplicadas, tan sólo el 25% se inyectó a personas que están en edad de riesgo: 502.082 son las vacunas de primera y segunda aplicación que se inocularon a personas mayores, pero no se precisa en los datos que cantidad de ciudadanos representan.
Con la llegada de las vacunas Sinopharm desde China, se habilitó la posibilidad de vacunar al personal de las escuelas y universidades que tengan menos de 60 años. Ya se aplicaron más de 300.000 primeras dosis, pero tan solo 52 de la segunda inoculación a nivel nacional según el último reporte del ministerio de Salud. La Ciudad tomó la decisión de completar la vacunación de los trabajadores de la salud con estas vacunas.
Las vacunas se distribuyen pero la aplicación se demora
Según el Monitor Público de la Vacunación que confecciona la cartera de Salud que actualmente conduce Carla Vizzotti, la cantidad de dosis totales aplicadas en el país es de 1.919.074 pero hay distribuidas 3.418.965 por lo que aún restan aplicarse el 44% de las vacunas entregadas a las provincias.
El distrito que menos cantidad aplicó a su población en cuanto a las vacunas que se le entregaron es Mendoza, que tan sólo inoculó el 49% de dosis que le llegaron. De las casi 2 millones de personas que viven en esa provincia, tan solo 12.000 pueden decir hoy que tienen la vacunación completa con ambas inyecciones necesarias para una protección completa frente al coronavirus.
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Santa Fe es la otra provincia que tan sólo aplicó la mitad de las vacunas que se le entregaron desde que comenzó la campaña en diciembre. Recibió 235.000 e inoculó apenas por arriba de las 117.000 sobre las 3 millones y medio de personas que viven en la provincia.
Hay otros seis distritos que adeudan aplicar más del 40% de las vacunas que Nación les mandó para su población: Entre Ríos, Corrientes, Misiones, Chubut, San Juan y Santiago del Estero también tienen serios problemas con la logística que les impiden avanzar más rápido con las inoculaciones.
Todas estas provincias se encuentran entre las que menos dosis recibieron en base a la población que tienen, pero aún así en los primeros dos meses y medio que lleva la campaña de vacunación son los más atrasados.
La provincia que está más al día con la vacunación
En contraposición a este grupo que demora las aplicaciones se encuentra un distrito del centro del país: La Pampa. Tan sólo le resta inocular el 15% de las dosis que le fueron entregadas y lidera a nivel nacional en este aspecto.
El distrito tuvo buenos resultados con el manejo de la pandemia y desde que llegó el coronavirus a la Argentina el 3 de marzo del 2020, registra 299 fallecidos y 19.500 casos. Ahora, con el plan de vacunación también es una provincia que se encuentra con buenos números.
«Esto marca una cuestión histórica del sistema de Salud de La Pampa», aseguró el gobernador Sergio Ziliotto en conferencia de prensa ayer. La provincia que administra es una de las principales beneficiadas con la cantidad de vacunas que son enviadas por el gobierno nacional: actualmente cuenta con dosis para el 7,2% de su población tan sólo por detrás de la Ciudad.
De las 25.750 vacunas enviadas para los 360.000 pampeanos resta que se apliquen 3.700 que corresponden principalmente a segundas dosis de Sputnik V a la espera también de completar el plan de vacunación con las dosis Covishield (Oxford/AstraZeneca) y Sinopharm.