La provincia de Santiago del Estero fue sacudida por una noticia horrorosa: un policía mató a su hija de un año y a su ex suegra, hirió a otros familiares y luego se suicidó. Su otro hijo, de 9 años, logró escapar y dar aviso a los vecinos y a la Policía.
El hecho ocurrió el viernes pasado, en el barrio El Triángulo de Monte Quemado. La Comisaría Comunitaria Nº22 fue la que recibió el alerta de lo que estaba ocurriendo y acudió inmediatamente a la vivienda, donde encontró sin vida el cuerpo del victimario, Nicolás Ábalos, su hija y su ex suegra. Además, se comprobó que también intentó asesinar a su ex pareja, a su otro hijo y a su ex suegro, quienes lograron sobrevivir.
“El asesino usó dos pistolas y tenía un cargador extra en el bolsillo. Disparó con las dos armas, por eso había dos calibres en el lugar”, informó el fiscal Santiago Bridoux.
De acuerdo a lo que se detalla en la investigación, el victimario y su ex mujer, de nombre Lorena Navarro, tuvieron una discusión y ella “volvió pidiendo auxilio a la casa de sus padres, cerró la puerta y dijo que él venía con el arma. De repente, rompió la puerta y acribilló a toda la familia”.
El fiscal del caso explicó al medio TN que hubo testigos que vieron cómo Ábalos “le disparó al hijo de 9 años, que salió solo con lesiones en la pierna y está fuera de peligro”. “El nene logró escapar y se cubrió detrás de un auto, mientras que Nicolás volvió a la casa y se pegó un tiro en la cabeza”, manifestó el fiscal.
El niño está fuera de peligro, mientras que Navarro y su padre están internados en estado reservado. Por el momento no hay una hipótesis clara que explique por qué ocurrió lo que ocurrió, y se barajan las posibilidades de que los asesinatos hayan ocurrido desencadenados por la pelea o de que haya sido un hecho premeditado.