Un crudo testimonio acaba de complicar al ex senador y ex gobernador tucumano, José Alperovich, quien se encuentra en juicio, acusado de haber abusado sexualmente de su sobrina. Declaró nada menos que la abuela de la denunciante, quien confirmó los ataques.

Ana María N. vivió con la víctima mientras ocurrían las presuntas agresiones sexuales. “Al otro día que ella dejó de trabajar fue a buscarme y me dijo que se había ido. Me contó que la había abusado sexualmente. Yo no lo podía creer. Mi marido era como un padre para él. No podía creer que hubiera hecho eso”, contó la abuela. 

La mujer aseguró que cada vez la veía más delgada a su nieta, que pasaba mucho tiempo en el trabajo y que de un día para el otro dejó de ir. Luego, su nieta le contó todo.

“Yo no la veía feliz trabajando. La veía muy angustiada. Cambió muchísimo. Estaba psicológicamente intranquila”, contó.

También aseguró que admira la valentía de su nieta quien “decidió enfrentar a un poderoso y denunciarlo”. “Yo no creía que pudiera hacerlo. Todo era muy difícil. Después de que ella declaró la vi más tranquila”, puntualizó Ana María. 

Según el relato de la abuela de la denunciante, la actitud de la denunciante cambió cuando comenzó a trabajar para Alperovich. 

La audiencia transcurrió en CABA y no estaban presentes ni el imputado ni la denunciante, sino que seguían todo el debate por zoom. En la primera, realizada el 5 de febrero, el exgobernador tucumano llegó al recinto acompañado por sus cuatro hijos, y afirmó: “La prueba va a decir la verdad”.

“Con todo el respeto que le tengo al Poder Judicial porque me ajusto a la Justicia y quiero la verdad, le pido que preste atención a las pruebas”, remarcó Alperovich.

Después de su declaración en el juicio, al exgobernador se lo vio cenando en un conocido restaurante de la Ciudad de Buenos Aires. La imagen causó indignación en redes sociales.