Un conmocionante caso de robo de bebés se produjo en Paraguay, donde la acusada de llevarlo a cabo fue una argentina que – disfrazada de enfermera- aprovechó un descuido y arrebató un niño que había sido dado a luz el día anterior.

El hecho ocurrió en la ciudad de Nanawa, cerca de Clorinda en la provincia de Formosa. Allí, Natalia Edith González, de 39 años aseguró estar embarazada y comentó a sus familiares que viajaría hasta la capital provincial para tener a su hijo. Pero todo resultó una farsa y la mujer fue detenida luego de haber cruzado al vecino país para robar un niño recién nacido de un nosocomio ubicado en el Barrio Obrero.

Además, se supo que no hay registros del ingreso de la ciudadana argentina a Paraguay, por lo que se sospecha que lo habría hecho a través de algún paso ilegal.

El pasado miércoles 16 se activaron todas las alarmas en ese hospital, al detectarse que un bebé nacido el día anterior había sido robado. Inmediatamente se activaron los protocolos correspondientes y se corroboró que, efectivamente, una mujer disfrazada de enfermera había sustraído a un recién nacido.

Las cámaras de seguridad fueron fundamentales para empezar a esclarecer el caso y a través de esa herramienta fueron siguiendo los pasos de González. Además, se dio aviso en todas las fronteras para que frenen cualquier movimiento sospechoso.

Eso fue clave para lograr detener a la mujer unos 50 metros antes de traspasar la frontera. Junto a ella, estaba el bebé que se encontraba en perfecto estado de salud.

Consultado al respecto la fiscal del caso Laura Finestra, informó que la mujer oriunda de Laguna Blanca mintió a toda su familia. Incluso confirmó que «conversamos con su pareja, Iván Paredes, y con otros familiares, y se incautaron los teléfonos celulares de la acusada, lo que nos permitió corroborar que ella les había mentido a sus seres queridos. Les dijo que estaba embarazada y que se trasladaría a Formosa para dar a luz, pero en realidad, cruzó a Paraguay el 14 o 15 de enero».

Asimismo, comentó que “no tenemos registro del ingreso clandestino de González a Paraguay, pero desde el 15 de enero comenzó a enviar fotos desde otro hospital. Esto nos permitió corroborar su accionar».

Además, afirmó que el marido no sabía nada sobre esta actitud de su esposa y que “se mostró sorprendido al enterarse de lo que había hecho su mujer”.

Por último, adelantó que le harán una pericia psicológica al esposo de González ya que existe la sospecha de que “ella pudo haber perdido un bebé, lo cual podría haber influido en su estado emocional y en la decisión de llevar a cabo este delito», aunque eso está en plena investigación.