Esta tarde trascendió en los medios un hecho insólito ocurrido en una comisaría de Villa Lugano, el 22 de diciembre pasado, cuando kilos de droga secuestrada desaparecieron de forma muy misteriosa.

La escandalosa situación ocurrió en la Comisaría 8A del barrio porteño de Villa Lugano. Los más de 410 envoltorios, pertenecientes a más de 40 causas distintas, estaban en el depósito judicial tras ser secuestrada en el marco de una causa por narcotráfico.

Cuando se precisó para la investigación, un oficial se la solicitó al policía encargado del deposito en cuestión. Este se mostraba evasivo ante el pedido, lo que llamó la atención. El mismo se había tomado licencia médica por «crisis de angustia» semanas antes.

Ante los reiterados pedidos, el oficial encargado del deposito respondió de manera inédita a sus colegas. En ese momento alegó un problema de adicciones y aseguró que intentaba recuperarse, por lo que no podía tener contacto alguno.

El comisario a cargo de la dependencia finalmente realizó la denuncia judicial y se abrió una investigación que lleva adelante la fiscal penal y contravencional Celsa Ramírez. En tanto, el efectivo sospechoso fue dado de baja en el marco de la investigación que se lleva adelante.

Mientras tanto, el comisario y una principal fueron derivados a distintas reparticiones con un sumario abierto.