La conductora de El Trece Viviana Canosa se presentó en Comodoro Py para formalizar una denuncia relacionada con presuntos casos de pedofilia que vincula a fiestas privadas de famosos, entre ellas Lizy Tagliani y otras figuras de Telefe.
Canosa había anticipado que haría la presentación judicial el miércoles, pero decidió adelantarla tras recibir amenazas. “Recibí mensajes y a las 3 de la mañana decidí adelantar mi declaración, ya les dije un montón”, expresó, visiblemente afectada.
Luego de radicar la denuncia, evitó dar demasiados detalles ante los medios: “Va a hablar mi abogado, escuchen a mi abogado”, dijo antes de cederle la palabra a su representante legal, Juan Manuel Dragani.
En sus redes sociales ya había dado señales de su estado emocional: “No dormí en toda la noche”, escribió en sus historias de Instagram. Más tarde, en declaraciones a la prensa, reiteró: “Entiendo el laburo que están haciendo todos, pero entiendan que estoy casi sin dormir desde ayer”.
La noche anterior, la conductora asistió a la avant premiere de Mazel Tov, la nueva película de Adrián Suar, y fue en medio del evento cuando comenzaron a llegarle mensajes intimidatorios. “Fui a ver a Adrián porque es mi jefe. Recibimos unos mensajes mientras mirábamos la película, razón por la cual decidí que la declaración fuera hoy y no mañana para quedarme tranquila”, explicó.
Consultada por el tipo de presiones que recibió, evitó dar precisiones: “No importa”, fue su escueta respuesta. Sin embargo, dejó en claro que esas situaciones fueron determinantes para adelantar su presentación judicial.
El disparador público de esta denuncia se dio el pasado viernes en su programa, cuando habló de su vínculo con Lizy Tagliani. “El viernes decidí hablar porque quería sacarle la careta a Lizy Tagliani. Para mí, Lizy Tagliani es un lobo con piel de cordero”, afirmó.
Y añadió: “No encontraba el momento para contar todo lo malo que me hizo. Y no pensé que iba a tener la repercusión que tuvo”.
