Tras Piedra que late, documental que abordaba el fenómeno social que implica cada recital de Carlos “Indio” Solari, los directores Julio Leiva y Maximiliano Díaz resolvieron redoblar la apuesta y conseguir lo que hasta el momento nadie había logrado: la palabra del Indio frente a una cámara. Y lo lograron, con Mario Pergolini como su interlocutor y las sierras de Tandil de fondo. Bienvenidos a Tsunami: un documental sobre el concierto que Solari dio en la localidad bonaerense el 12 de marzo pasado ante 200 mil personas, y que cuenta con la palabra del líder de los Fundamentalistas del Aire Acondicionado, sus músicos, su manager Julio Saez y el staff técnico que lo acompaña. Hasta el momento más de un millón de personas tuvieron acceso al registro a través de Vorterix.com, el único lugar donde se podrá ver esta pieza audiovisual. A continuación, un punteo con lo cinco críticas que merece esta experiencia Solari en su “océano de gente”.
- Solari sabe que se enfrenta a la muerte. Por eso decidió abrir el juego y se muestra por primera vez ante una cámara. Asimismo, su mujer Virginia le abrió una página de Facebook, llamada Virumancia, y prepara sus memorias junto al periodista y escritor Marcelo Figueras. “Me interesan más los David Bowie que los Eric Clapton de esta vida”, supo decir alguna vez el Indio, y el último disco de Bowie se cuela en la charla con Pergolini. El deceso de Bowie, que actuó a todo nivel como su última perfomance, es la verdadera influencia actual para el cantante, en estos días en donde “Mr. Parkinson” se manifiesta con síntomas de rigidez antes que de temblequeos.
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Pergolini le pregunta si se planteó tocar en lugares más chicos, y la respuesta del Indio es que eso es imposible, ya que sus fans no conocen el concepto de sold out y van igual. La respuesta es legítima si uno piensa en los desmanes que se pueden evitar pero también esconde un costado facilista. ¿Qué sentido tiene ir a un lugar en el que no hay más entradas? Ninguno. Ahí es donde el artista debería aleccionar a su público. Y más cuando luego Solari afirma que el “ni en pedo” estaría haciendo pogo en un tema como “Jijiji”.
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Menciones encubiertas a Marcelo Torres, ex bajista de los Fundamentalistas del Aire Acondicionado, quien no es más parte del grupo y que fue reemplazado por Fernando Nalé, quien “toca un bajo de cuatro cuerdas y no hace acordes” (Torres toca con uno de cinco y su estilo es bastante barroco). Una vez más el Indio prefiere jugar al misterioso al abordar conflictos personales y a oscurecer antes que aclarar, aprovechando la falta de repregunta. Una pena.
- Y lo anterior también se aplica a la hora de hablar de Patricio Rey y sus Redonditos de Ricota, aunque de forma más errática. Solari dice que Skay hizo tres solos memorables, cita “Todo un palo”, “Etiqueta Negra” y el tercero… nos lo debe. Dice que Sergio Dawi tocó el famoso fraseo de “Jijiji” cuando en realidad fue Willy Crook. Y habla de “traición” sin nombrar a Skay ni a la Negra Poli, y se queda ahí. Si somos buenos podemos aceptar lo que dice acerca de lo frágil de su memoria y perdonar esas gaffes. “Fue una buena banda”: con esa frase cierra la referencia, no sin antes aclarar que cada vez le piden menos “que se vuelvan a juntar”.
- Las imágenes aéreas tomadas por sendos drones impactan al comienzo, pero al repetirse el recurso cansan, más allá que la multitud sea descomunal. Lo mismo ocurre con las tomas de las afueras de Tandil. Y las entrevistas al entorno oficial están más cercanas al testimonio de cualquier fan ricotero que al de un colega que trabaja al servicio de otro. La oportunidad de indagar más a fondo algunas cuestiones también parece haber sido desperdiciada.