El equipo económico de Luis Caputo se encuentra en Washington por la evaluación de las primeras metas impuestas para el Fondo Monetario Internacional, que el gobierno dice haber sobrecumplido. De esta forma, se espera una respuesta favorable en medio de la búsqueda de fondos para salir del cepo cambiario.
Aunque el ministro de Economía no viajó con su grupo de trabajo, si acompañó al presidente Javier Milei a California, Estados Unidos, por la visita de este a la cumbre de inversores en el Instituto Milken.
Por su parte, el secretario de Finanzas, Pablo Quirno, y el vicepresidente del Central, Vladimir Werning, fueron quienes presentaron los números del primer trimestre de la nueva administración frente a los funcionarios del organismo internacional, por la octava revisión del acuerdo.
El gobierno busca destrabar el desembolso de más de 800 millones de dólares que corresponden a esta etapa del acuerdo revisado. Cabe destacar que este se incumplió durante la gestión de Alberto Fernández y Sergio Massa, lo que provocó la última reversión con nuevas metas más exigentes.
El Fondo Monetario destacó el logro de un superávit financiero por parte del Gobierno, algo que no se lograba hacía décadas. Tanto el organismo como el Departamento del Tesoro de los Estados Unidos elogiaron los “impresionantes” avances logrados en los primeros meses del libertario.
En esa línea, Gita Gopinath, la número dos del Fondo, pidió, semanas atrás en su visita al país, “continuar los esfuerzos para proteger a los más vulnerables durante un difícil proceso de estabilización”.
Por otro lado, Rodrigo Valdés, director del Departamento del Hemisferio Occidental, señaló que las medidas están enfocadas en mejorar la “calidad y durabilidad” del ajuste fiscal.
Superávit fiscal primario
El gobierno de Javier Milei anunció que el sector público nacional registró en marzo un superávit fiscal primario (sin descontar los compromisos de deuda) que llegó a $625.034,1 millones de pesos.
De esta forma, de acuerdo a estimaciones del Iaraf, el saldo primario ascendió en los primeros tres meses del año a $3.868.000 millones, equivalente a 0,6% del PBI. Así, se cumplió con el punto impuesto por el Fondo que indicaba que para este período debía tener un superávit primario de al menos $962.400 millones.
A pesar de que la octava revisión se destrabará sin mayores problemas, aún queda la aprobación formal de la instancia técnica y luego el visto bueno del directorio del Fondo, que recién entonces realizará el desembolso que espera el gobierno.
