Este jueves se realizó el Consejo del Salario para determinar los montos mínimos a nivel nacional, pero finalmente fracasó y el gobierno deberá determinarlo por medio de un decreto en los próximos días.
La información fue confirmada a TN por parte de la CGT y desde la nueva administración. Desde la central obrera acusaron al gobierno de impedir un acuerdo.
Las tratativas entre los gremios y los empresarios no logró avanzar con éxito en las horas de reunión, por lo que la Secretaría de Trabajo tendrá que aplicar el porcentaje de la próxima actualización y el momento en el que se hará.
Por un lado, la CGT reclamó un 85% de aumento, estipulando la base en $288.600 a partir de febrero. Las tres centrales obreras apoyaron la propuestas, pero los empresarios no estuvieron de acuerdo, a pesar de haberse presentado sin una propuesta económica.
La cartera de Omar Yasín tendrá que establecer una nueva cifra, por lo que la CGT emitió un fuerte comunicado tras el fracaso de la reunión: “Rompiendo una larga tradición de dialogo social tripartito y acuerdos colectivos en el ámbito del Consejo del Salario en nuestro país, el Gobierno impidió el normal desarrollo de la reunión con el único objetivo de boicotear cualquier posibilidad de acuerdo”, aseguró la central.
Además, explicaron: “En tiempos de altísima inflación y con aumentos intolerables e injustificables de precios, establecer un piso social es necesario e impostergable”.
Así mismo, detallaron: “El Gobierno evitó por todos los medios posibles que la reunión se desarrollara con normalidad, los empresarios encabezados por la Unión Industrial Argentina fueron complacientes con esa estrategia y no formularon ninguna propuesta".
"Los mismos empresarios que en la OIT defienden el diálogo social y los consensos colectivos como herramienta fundamental para el desarrollo económico y social del país, hoy borraron con los hechos lo que pregonan con palabras en los foros internacionales”, continuaron.
Antes de cerrar, puntualizaron: “La Confederación General del Trabajo ratifica la importancia de establecer un nuevo valor del Salario Mínimo Vital y Móvil, absolutamente degradado por el intolerable proceso inflacionario".
"La irresponsabilidad social puesta de manifiesto hoy por la Secretaría de Trabajo no hace más que confirmar la absoluta ajenidad del Gobierno frente al drama social que atraviesan los argentinos”, sentenciaron.