El índice de precios de alimentos en julio mostró un aumento significativo del 3,9%, en contraste con el 3,1% registrado en junio, según el último informe de la consultora LCG (Labour Capital & Growth). Este crecimiento se da principalmente por el notable incremento en los precios de las verduras, afectadas por las recientes heladas que impactaron el cordón frutihortícola en la región bonaerense.
El aumento en los precios de las verduras alcanzó un 6,7% en julio, liderando la lista de los productos que más subieron en el último mes. Esta situación es una de las principales causantes del ajuste en el costo de los alimentos, que también incluyó un incremento del 5,2% en el precio del pan, reflejando un encarecimiento en los insumos básicos para su producción.
Dentro de las categorías que mayormente contribuyeron al aumento general, los lácteos, los productos panificados y las carnes tuvieron un impacto notable. Los lácteos y huevos vieron un incremento del 4,1%, mientras que los productos panificados y carnes se incrementaron en un 5,2% y 3,5%, respectivamente. En contraste, algunas categorías experimentaron una disminución en sus precios, como el azúcar, que cayó un 6,4%, y otros productos como el aceite y las comidas listas para llevar también vieron reducciones.
El análisis de la variación semanal de precios reveló que, a pesar de una caída en ciertos productos, la inflación general de la canasta básica en la última semana de julio se ajustó a un modesto 0,2%. Esta cifra muestra una desaceleración en comparación con el 0,6% de la semana anterior, y marca una notable diferencia con el 1,8% registrado en la primera semana del mes. La segunda semana de julio, por su parte, mostró un aumento más moderado del 0,5%.
Este patrón sugiere que, a pesar de las recientes desaceleraciones, la inflación mensual en alimentos sigue enfrentando desafíos significativos. El índice de precios mensual, con su incremento del 3,9%, está en camino de superar el 4% proyectado por algunas consultoras privadas. La cifra oficial, proporcionada por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC), se dará a conocer el 14 de agosto, y proporcionará un panorama más claro del comportamiento inflacionario del mes de julio.
Con una inflación anual que alcanzó el 271,5% a finales de junio y un incremento del 3% en los precios de alimentos en junio, los datos reflejan una continua presión inflacionaria. La dinámica actual plantea desafíos persistentes para la estabilidad económica y el poder adquisitivo de los consumidores, destacando la necesidad de políticas efectivas para mitigar el impacto de la inflación en los hogares.