A partir de este viernes los precios de los combustibles subirán un 2,75 % en todo el país. Si bien esto implica un incremento, el mismo será menor a lo esperado, ya que se aguardaba un ajuste del 4 %.
El ajuste lo aplicará YPF y se espera que sea imitado por sus competidores Shell, Axion, Puma, Dapsa, Gulf y Refinor.
Sin embargo, en la zona de la Patagonia el ajuste estará por encima de esa cifra con el objetivo de achicar la brecha con el resto del país, que es del 20%, considerando los costos logísticos de traslado desde las refinerías hasta los consumidores.
Este incremento buscará compensar los efectos de la devaluación de octubre (2 puntos porcentuales) y la actualización de impuestos y no cargará a los valores adicionales para que los precios locales se acerquen a los internacionales, ya que esta semana bajó el petróleo crudo en el mundo.
El aumento de la nafta y el gasoil sucede luego de que en octubre se aplicara el primer descenso en el precio de los combustibles en casi 6 años: 1% en la nafta y 2% en gasoil, que en los márgenes de las petroleras fue de 4% y 5%, respectivamente.
Con esto, la nafta de YPF en CABA irá de $ 1.048 el litro a $ 1.077 el litro. Con esto, habría tenido un incremento de 95 % en lo que va del año contra una inflación que habrá acumulado alrededor de 107,5% en los primeros 10 meses y 114% hacia finales de noviembre.
Desde diciembre de 2023, cuando la gestión de La Libertad Avanza llegó al gobierno, la nafta súper subió 166,5%.
Las ventas de combustibles al público en estaciones de servicio cayeron nuevamente en septiembre acumulando una baja del 6 % en lo que va del año.