Hace menos de un mes, a fines del mes de abril, una joven de 23 años declaró que había sido abusada sexualmente por un hombre en el Hospital Fernández. Según manifestó, el hombre la amenazó en uno de los baños del hospital, en donde ella también trabajaba.
Actualmente, se dio a conocer el testimonio de la víctima, en donde contó la dura situación que está atravesando y como hace para sobrellevar el miedo constante que tiene. “Tengo que enfrentarme todos los días a mi cabeza”, expresó.
Si bien la policía logró detener al sospechoso del abuso que duró 40 minutos, la joven sostuvo que sigue sintiendo miedo e inseguridad: “Él está como si nada, tomando mate en la celda mientras yo estoy viviendo un infierno. Revivo esta situación todo el tiempo. Hoy no puedo ser madre, no tengo fuerza para levantarme de la cama”.
“Tengo miedo de todo. ¿Cómo voy a estar tranquila si tenía un montón de antecedentes penales y estaba libre? ¿Qué garantía tengo yo de qué va a haber justicia?”, manifestó refiriéndose al sistema judicial argentino.
“Tengo que tomar pastillas para todo. Para dormir, para salir de la cama y ni así puedo lograrlo. Hoy tengo que enfrentarme todos los días a mi cabeza. Yo era una persona re sociable, hoy no puedo salir sola de mi casa”, declaró con enojo.
¿Quién es el imputado por el abuso sexual?
El detenido es un hombre de 31 años que se encontraba en situación de calle. En el momento del abuso sexual, estaba acompañando a un familiar a la guardia del Hospital Fernandez.
Luego de capturarlo, se dio a conocer que el joven ya tiene varios antecedentes penales. Entre ellos se encuentran robos, cinco por tenencia de estupefacientes, y lesiones leves en el marco de violencia de género.
Ahora, tras estos hechos, se le sumó la imputación de abuso sexual con acceso carnal contra la joven empleada. Si bien no se dio a conocer la identidad de la víctima, se sabe que es madre de dos nene de 8 y 5 años.