Rusia habría descubierto en los últimos meses lo que sería la mayor reserva de petróleo del mundo en la Antártida, más específicamente en la zona de reclamo argentino. La información fue publicada por el medio británico The Telegraph.
El descubrimiento del yacimiento de petróleo fue reportado inicialmente hace tres días, con una estimación aproximada de 511.000 millones de barriles de petróleo. El descubrimiento habría sido realizado, según el medio, en una vasta área que se extiende desde el Polo Sur hasta la Península Antártica y el Mar de Weddell, porción también reclamada por Gran Bretaña y Chile.
Este volumen de barriles es equivalente a treinta veces las reservas de Vaca Muerta, ubicada en la provincia de Neuquén y que cuenta con cerca de 16.000 millones de barriles.
Pese a que la extracción de recursos en la Antártida está prohibida, excepto bajo circunstancias científicas específicamente autorizadas, los investigadores rusos habrían comunicado a Moscú su descubrimiento, realizado por el buque Alexander Karpinsky de Rosgeo, una agencia rusa dedicada a la exploración de recursos minerales para su explotación comercial, que fue establecida en 2011 y comprende 63 empresas.
La validez de estos hallazgos fue discutida recientemente ante el Comité de Auditoría Ambiental de la Cámara de los Comunes del Reino Unido, donde se presentaron pruebas sólidas. A pesar de los intentos del medio The Telegraph por obtener comentarios de los directivos de Rosgeo, los mismos no declararon nada al respecto.
En el Mar de Weddell, situado en el territorio Antártico Argentino, se encuentran significativas reservas de petróleo y gas. Este hallazgo resalta la importancia estratégica del territorio en la escena geopolítica, especialmente para Argentina, que mantiene un activo reclamo territorial junto con Chile y Gram Bretaña.
Además, Argentina continúa defendiendo su derecho sobre las Islas Malvinas ante la Organización de las Naciones Unidas, reforzando su postura en búsqueda de reconocimiento internacional de su soberanía.