Según el análisis de sus anillos de crecimiento, el arbusto hallado por los investigadores de Padua en Finlandia comenzó a crecer en el año 260 d. C. y murió en 1906, aunque es posible que haya vivido incluso más tiempo. El estudio ha sido publicado en la revista Ecology.
El enebro descubierto es el arbusto más longevo jamás datado mediante el análisis de anillos anuales, lo que lo convierte también en la planta leñosa más antigua de Europa identificada con esta metodología.
El profesor Marco Carrer, líder del equipo de investigación de la Universidad de Padua, señaló: "El enebro es la especie leñosa más extendida en el mundo. Puede encontrarse desde el nivel del mar hasta los límites superiores de la vegetación, desde Alaska hasta el Etna, desde Japón hasta Escocia".
En esa línea, agregó: "Es una especie extremadamente versátil, capaz de soportar tanto temperaturas abrasadoras como el frío extremo cerca de los glaciares. Ahora, a este récord se suma el de ser el arbusto más antiguo del mundo".
El descubrimiento se realizó durante una visita de los investigadores al Instituto de Investigación Subártica Kevo de la Universidad de Turku, ubicado en Utsjoki. En 2021, al analizar la planta, se estimó que tenía 1.242 años. Sin embargo, en 2024, tras una nueva revisión, se descubrió que su edad real era de 1.647 años.
Otros enebros milenarios en la región
El equipo también encontró otros cuatro enebros en la misma zona con más de mil años de antigüedad. Además, su estudio abarcó ejemplares de regiones árticas y subárticas de Finlandia, Groenlandia, Islandia, las Islas Feroe, Noruega, Suecia y los montes Urales del norte.
En particular, cerca de la Estación de Investigación Científica de Abisko, en Kiruna, Suecia, también se identificaron enebros que superan el milenio de vida.
La investigadora Angela Luisa Prendin, coautora del estudio, explicó la relevancia del análisis de los anillos de crecimiento de estos arbustos. "Estudiamos los anillos de la madera, de los que extraemos información valiosa sobre los cambios climáticos y el desarrollo de la vegetación".
Y detalló: Sin embargo, en las regiones más extremas del norte, los árboles dan paso a plantas más pequeñas. De ahí la necesidad de centrarnos en una especie muy común y longeva, pero capaz de producir anillos como los árboles: el enebro era perfecto para nuestros estudios".
Debido a la referencia cruzada de los anillos anuales de varios enebros antiguos de la misma región, los científicos lograron determinar con exactitud los años calendario de crecimiento de un solo enebro.
Esta información no solo es clave para comprender las variaciones climáticas y los fenómenos meteorológicos del pasado, sino que también permite fechar con precisión hallazgos arqueológicos de material de madera.