En medio de una severa crisis energética, el gobierno señaló al clima y a la gestión anterior como los principales responsables de la escasez de gas que afecta al país. El secretario de Energía, Eduardo Rodríguez Chirillo, explicó en su cuenta de X (anteriormente Twitter): “Estamos en el otoño más frío desde 1980, no pronosticado y con una fuerte demanda de gas. Sumado a situaciones excepcionales como la limitación de importación de energía de Brasil y la salida de embalse, se necesitó incorporar volúmenes de GNL a precio de mercado, programados para más adelante”.
En este marco, desde el Gobierno sostuvieron que la demanda de gas residencial se duplicó, en comparación con mayo de 2023, complicando aún más el escenario energético.
En respuesta a esta situación, el funcionario a cargo de Energía dijo que se acordó con la brasileña Petrobras una asistencia para agosto y septiembre para cubrir esta reducción. Sin embargo, la empresa Transportadora Gas del Norte (TGN) se declaró en estado de fuerza mayor, interrumpiendo la entrega de gas en varios puntos del país (esto por la falta de pago del gobierno ante la millonaria deuda que mantiene hace 6 meses). Además, un barco de Petrobras, comprado de urgencia, no pudo descargar en Escobar, agravando la escasez.
El secretario de Energía aprovechó para criticar la gestión de Alberto Fernández por las obras inconclusas en el gasoducto Vaca Muerta. Las obras del primer tramo del gasoducto Néstor Kirchner (GPNK) y las plantas compresoras de Tratayén y Salliqueló debían haber finalizado en septiembre de 2023. «Es un despropósito afirmar que sea responsabilidad de este gobierno no contar con la capacidad plena del GPNK», afirmó Chirillo, resaltando que la actual gestión regularizó pagos y destinó más de $77.000 millones para la finalización de las obras.
Buque de Petrobras y esperanza de abastecimiento
Este miércoles, el gobierno logró destrabar la compra de un buque de gas a Petrobras. Hoy a las 9, se autorizó la descarga del buque que se encuentra en operación. Enarsa compró el viernes un buque con 44 millones de m³ de GNL a Petrobras, que debía empezar a regasificar hoy. Sin embargo, la empresa impugnó la carta de crédito, retrasando la descarga. El barco estuvo amarrado y conectado a mangueras desde las 16 del día anterior.
Para asegurar el abastecimiento, se procedió a cortar el suministro de gas a la demanda no prioritaria (industrias, centrales termoeléctricas y estaciones de GNC) para proteger a los usuarios prioritarios (hospitales, escuelas, hogares y comercios). El objetivo es seguir abasteciendo la «demanda prioritaria» y los hogares residenciales. En este contexto, el Gobierno adelantó que a lo largo del día, se irá regularizando la situación de cortes de suministro.
Ahora, con las plantas compresoras del gasoducto de Vaca Muerta aún en obra (tras la paralización por más de cinco meses)y la importación de GNL retrasada, Argentina enfrenta un invierno con enorme incertidimbre. La dependencia del clima y la necesidad de infraestructura energética robusta son más evidentes que nunca.