El expresidente Alberto Fernández denunció este miércoles que el gobierno de Nicolás Maduro lo bajó como veedor de las elecciones que se harán el domingo próximo en Venezuela.
Sorprendido por la medida, a la que tildó de “insólita”, explicó que el motivo que le dieron fue que sus dichos en una entrevista radial causaban molestias y generaban dudas sobre su imparcialidad ante los comicios.
A través de X, el expresidente contó lo que le pasó y adjuntó la carta que le habían mandado desde Caracas el pasado 12 de julio, para que participara como veedor. Las declaraciones que generaron las fricciones fueron las que pronunció el martes en Radio Con Vos.
Dijo que iría hasta Venezuela a “poder hablar con la oposición”, y que sus deseos eran que hubiera una “elección trasparente” para que el país recuperara su “convivencia democrática” y para que regresaran los que andaban “deambulando por el mundo por la causa que fuera”.
“Si Maduro es derrotado, lo que tiene que hacer es aceptar. Como dijo Lula, el que gana, gana; y el que pierde, pierde. Punto. Se terminó. Así es la democracia. No voy a legalizar a nadie, sino que voy a hacer lo que me pidieron, ser un veedor de las elecciones para que todo funcione bien”, aseguró el exmandatario en la entrevista.
La decisión de Venezuela
Fernández reveló que ayer desde la administración venezolana le transmitieron la voluntad de que no viajara y desistiera de cumplir con la tarea de revisión que le había encomendado el Consejo Nacional Electoral.
“La razón que se me dio es que, a juicio de aquel gobierno, declaraciones públicas realizadas por mí ante un medio nacional causaban molestias y generaban dudas sobre mi imparcialidad”, dijo el dirigente de Unión por la Patria (UP), que durante su mandato fue duramente criticado por la oposición debido a sus posturas con respecto a la gestión de Maduro, ya que las consideraban concesivas.
“Entendieron que la coincidencia con lo que había expresado un día antes el presidente de Brasil, Luiz Inácio ‘Lula’ da Silva, generaba una suerte de desestabilización del proceso electoral”, aseguró.
“Solo dije que en una democracia, cuando el pueblo emite su sufragio, ‘el que gana, gana; y el que pierde, pierde’. Y que si el oficialismo fuera eventualmente derrotado debía aceptar el veredicto popular. Otro tanto debería hacer la oposición en el caso de que el resultado le fuera adverso. Ante la insólita demanda, creí conveniente no viajar y no dar lugar a que se me atribuya querer enturbiar una jornada electoral trascendental, cuando solo buscaba cumplir con la tarea propia de un veedor electoral”, anunció Fernández.