El Gobierno manifestó a las autoridades del Reino Unido su «preocupación» por los «recientes aterrizajes de aeronaves militares británicas en países vecinos» y además solicitó «informes a las autoridades pertinentes».
Según trascendió, cinco cazas Eurofighter Typhoon, un Airbus A400M (ZM4127) y un Voyager Airbus 330 KC2 (ZZ334) de la Real Fuerza Aérea del Reino Unido de Gran Bretaña aterrizaron en la tarde del viernes pasado en la Base Aérea de Galeão en Río de Janeiro, y hasta la 0 hora del sábado 9 de noviembre.
«Esta preocupación se ha comunicado al Gobierno británico a través de una nota a su Embajada en Buenos Aires, reafirmando la determinación de la Argentina de defender sus derechos soberanos y su disposición a un diálogo constructivo en el marco del derecho internacional para encontrar una solución justa, pacífica y definitiva», sostuvo la Cancillería, a cargo de flamante jefe Gerardo Werthein.
Y agregó: «La República Argentina reafirma sus imprescriptibles derechos de soberanía sobre las Islas Malvinas, Georgias del Sur, Sandwich del Sur y los espacios marítimos circundantes, y su compromiso con una solución pacífica al diferendo con el Reino Unido».
En 2022, durante la gestión de Alberto Fernández, hubo un hecho similar cuando el gobierno brasileño, a cargo de Jair Bolsonaro en ese momento, defendió los permisos otorgados para que aviones militares del Reino Unido que tenían como destino las Islas Malvinas hicieran paradas en ese país. El entonces embajador argentino en Brasil, Daniel Scioli, había presentado un oficio ante el gobierno del vecino país en el que expresó su «preocupación» y «sorpresa» por la situación.
Fuentes de la secretaría de comunicación del Ministerio de Relaciones Exteriores brasileño dijeron en aquella oportunidad que «Brasil apoya los legítimos derechos de Argentina en la disputa de soberanía» sobre estas islas, las Georgias del Sur y Sandwich del Sur, pero que eso «no afecta las relaciones con el Reino Unido, un socio importante para Brasil».