Esta mañana aparecieron carteles con la imagen de la vicepresidenta, Victoria Villarruel, que generaron revuelo: se podía ver a la titular del Senado junto a la leyenda “Victoria Conducción”. El hecho, sumado a la creciente tensión entre Villarruel y el presidente Javier Milei, de inmediato hizo pensar en que se trataba de una prueba de que la vicepresidenta está ‘pensando en un armado propio, pero desde su entorno salieron a desmentirlo: “Es una práctica de la vieja política poner carteles en la calle para incentivar conflictos. Y nosotros no somos la vieja política”, afirmaron en el entorno de la titular del Senado asegurando que “nunca harían algo así”.
Los afiches, que aparecieron alrededor del Congreso de la Nación, mostraban a Villarruel con la leyenda “Dios, Patria, Justicia Social. La agenda de la Patria”. Arriba las Islas Malvinas pintadas de celeste y blanco, una imagen de la Virgen de Luján y una escarapela. La firma es del Movimiento Nacional Justicialista y una agrupación identificada como José Ignacio Rucci.
En uno de sus ángulos de los afiches aparecen las efigies de José de San Martín, Juan Manuel de Rosas, Juan Domingo Perón y el ex coronel y líder carapintada Mohamed Alí Seineldín, condenado por los alzamientos militares contra los gobiernos de Raúl Alfonsín y Carlos Saúl Menem.
Desde las oficinas de Villarruel no descartaron que la pegatina tenga el objetivo de sembrar la discordia y aumentar la tensión entre la vicepresidenta y Milei. Recientemente, la relación entre ambos sumó nuevos y hostiles capítulos, sobre todo a partir de una reciente entrevista que el presidente concedió a Esteban Trebucq, donde dijo que la vice estaba “más cerca de la casta” y del “círculo rojo”. “Villarruel no tiene ningún tipo de injerencia en la toma de decisiones. No participa de las reuniones de Gabinete. Decidió no participar. Hace mucho tiempo que decide no participar en las reuniones de Gabinete. El diálogo es lo que se necesita institucionalmente para cumplir con nuestros roles. Ella en su visión, en muchas de las cosas que nosotros hacemos está más cerca del círculo rojo, de lo que ella llama la alta política, y lo que nosotros llamamos la casta”, fueron las exactas palabras del mandatario.
Se dijo que Villarruel estaba dispuesta a responderle a esas declaraciones, pero finalmente la vice llevó adelante varios gestos que parecían apuntar a descomprimir la tensión, como recibir al jefe de Gabinete, Guillermo Francos, confirmando que iban a defender a “nuestro gobierno”, el mismo día en que Francos dio su informe del primer año de gestión en el Congreso.