El ministro de Salud bonaerense, Nicolás Kreplak, salió a diferenciarse del anuncio del Gobierno nacional sobre el régimen migratorio y descartó que en los hospitales públicos de la provincia se vaya a cobrar la atención médica a extranjeros.
«Las ‘medidas’ que anuncia el gobierno nacional carecen de conocimiento del funcionamiento del sistema y solo buscan provocar, generar odio y resentimiento», escribió el funcionario de Axel Kicillof en su cuenta de la red social X, pocos minutos después de la conferencia del vocero presidencial, Manuel Adorni.
El ministro le avisó al Gobierno que «no cuenten» con la provincia de Buenos Aires para arancelar la atención sanitaria, y se quejó de que el tema no se haya mencionado el lunes, cuando se reunió el Consejo Federal de Salud: «Ayer estuvimos con las y los ministros de Salud de todo el país y nunca se planteó una situación ni similar a la anunciada».
Además, Kreplak citó un posteo suyo que data de julio, en el que ya se había referido a la discusión sobre cobrarle a los extranjeros: «Las ideas vinculadas al cobro de prestaciones con la excusa de achicar el gasto público son en realidad un fuerte debate sobre la concepción sobre el derecho a la salud y el rol del Estado», planteó.
Y completó: «Lo cierto es que los datos reflejan otra realidad. Demuestran que la atención de personas no residentes tiene un impacto mínimo en el sistema de salud. En la PBA, solo el 0.2% de las consultas y el 0.8% de las internaciones corresponden a extranjeros».
No obstante, Adorni citó el caso de Salta, que le cobra la atención médica a los nacidos en otro país desde febrero de este año, y comentó que «allí bajó un 95% la atención a extranjeros y se generó un ahorro de 60 millones de pesos» tras la adopción de esa medida.