El jefe de Gabinete, Guillermo Francos, reconoció la posibilidad de que el presidente Javier Milei ponga en consideración la candidatura de una mujer a ocupar la Corte Suprema de Justicia. Lo sostuvo durante su exposición en el Senado en su tercer informe de gestión de gobierno.

«El Gobierno mandó al Senado estos dos pliegos (Ariel Lijo y Manuel García Mansilla) y tiene que resolver. Entendemos el reclamo por la presencia de una jueza mujer en la Corte. Seguramente, será un tema que el Presidente va a considerar, en el caso de que estos pliegos no avancen», dijo Francos.

Se trata de uno de los reclamos centrales que le realiza la oposición a la Casa Rosada. Sería para ocupar el lugar que dejó la ex ministra de la Corte Helena Highton.

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Para ese espacio sin ocupar, el oficialismo postuló a Lijo. Sin embargo, el pliego del juez federal es el más encaminado a quedar habilitado para su tratamiento en el recinto.

Por lo tanto, los ojos se posan por sobre la figura del abogado constitucionalista, García Mansilla. Su pliego tiene poco apoyo y es considerado por el Senado como un perfil conversador, además de muy cercano a los libertarios.

Previamente, el senador que tomó distancia de La Libertad Avanza Francisco Paoltroni se quejó ante Francos, de que si Milei avanza por decreto con las designaciones de jueces para la Corte para asó sortear los obstáculos que está teniendo la iniciativa, sería «una de las peores señales de autoritarismo».

«Estaría cometiendo un gravísimo error para la institucionalidad, para la división de los poderes, creo que esto atenta contra los intereses de todos los argentinos», agregó el formoseño.

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Al momento de responderle, el jefe de Gabinete reiteró la posibilidad de que el primer mandatario apele a un decreto para nombrar a Lijo y García Mansilla.

«Yo no descarto que pueda pasar que, si la Corte se queda en una situación cercana a la acefalía, el Presidente pueda ejercer esta facultad, que está establecida en la Constitución, para designar en forma transitoria ministros de la Corte que después puedan ser ratificados por el Senado», argumentó.