Esta semana el presidente Javier Milei se mudará a la Quinta de Olivos, a pesar de que no están listos los caniles que el mandatario pidió para sus perros Conan, Murray, Milton, Robert y Lucas: se trata de sus mastines ingleses, sus “hijitos de cuatro patas” como él los llama, que llevan el nombre de famosos economistas liberales y libertarios. (Milton Friedman, Murray Rothbard y Robert Lucas).
Según consigna un artículo publicado en Ámbito Financiero por la periodista Liliana Franco, una arquitecta será la encargada de la obra que será pagada de manera personal por el Presidente, aunque la construcción está demorada porque el refuerzo de las paredes de los caniles contiene insumos importados que no son fáciles de conseguir en este momento. De acuerdo a la información proveniente de Casa Rosada que se cita en el artículo, desde el 10 de diciembre se espera poder importar los insumos, pero aún no se han conseguido los dólares del Banco Central para pagarlos.
“No puedo llevar a mis hijitos a la Quinta de Olivos porque no autorizan los dólares necesarios, pero es lo que les ocurre a miles de argentinos”, cuentan que reflexiona el mandatario.
Los mastines habitarán en la Quinta de Olivos en una casa que necesita que las paredes sean reforzadas, ya que cada uno de ellos pesa unos 100 kilos.
Amigos del presidente comentan que tuvo que reparar las paredes de su departamento dos veces, debido a que vivía junto con todos sus perros.
El gobierno liberó las importaciones pero no así los pagos. El Banco Central dispuso distintos plazos para otorgar las divisas para las compras externas y, para la mayoría de los productos, contempla el pago en plazos de 30, 60, 90 y 120 días, a razón del 25% para cada uno de ellos.
En tanto, este viernes el Presidente viajará a Río Gallegos y el sábado por la mañana, si están dadas las condiciones meteorológicas, partirá a la base Marambio para permanecer allí un par de días.
