El gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, condenó ayer la intervención policial contra las manifestaciones en contra de la Ley Bases y exigió la “liberación inmediata” de quienes aún se encuentran detenidos. 

Así mismo, le reprochó al gobierno de Javier Milei que calificara de “terrorismo” o “golpe de Estado” a las manifestaciones. “Es muy evidente que están intentando convertir una posición democrática en una victimización que no ocurrió ni existió. Quieren plantear fantasmas, es muy feo y muy triste ver a un gobierno denunciar golpe de Estado y terrorismo en una marcha pacífica”, dijo en entrevista con AM750. 

Las palabras de Kicillof hacían referencia al comunicado emitido por la oficina presidencial la semana pasada, donde se elogió la actuación policial “reprimiendo a los grupos terroristas que con palos, piedras e incluso granadas, intentaron perpetrar un golpe de Estado, atentando contra el normal funcionamiento del Congreso de la Nación Argentina”. 

Luego de una jornada marcada por protestas, treinta personas terminaron detenidas. Actualmente, la mitad de ellas continúa en esa situación, ya que el resto fue liberado. 

“Que haya presos por manifestarse en democracia es un espanto”, puntualizó Kicillof, quien aseguró que había infiltrados en la movilización. “Es una práctica lamentable y penosa. No puedo hacer una denuncia, pero es lo que se ve en muchas imágenes” manifestó. 

En esa línea, el gobernador bonaerense cuestión la Ley Bases, alegando que “agrede a la producción, el trabajo y los derechos” y que “no tiene un artículo a favor de los derechos de los sectores medios”. 

“Es una ley de entrega de los recursos naturales y el patrimonio natural. Le da superpoderes al presidente que gobierna por decreto. Legaliza un modelo económico y un modo de gobierno. Los proyectos en todas sus versiones son malísimos para quienes se quieren jubilar, para el trabajador, para las pymes y la producción nacional”, aseguró Kicillof y aseguró que la gente “se fue a manifestar contra esto porque es una agresión y es la profundización de políticas terriblemente nocivas”.