Después de una semana de tensión y conflicto, el Gobierno de Javier Milei busca destrabar la problemática en Aerolíneas Argentinas y los gremios del sector aeronáutico. En ese contexto, se llevaron a cabo otras tres reuniones entre las partes en las que se llegó a un principio de acuerdo.
Desde el gobierno advirtieron también que con «un solo paro más» que hagan los gremios bastará para comenzar el cierre de la empresa, a través de un proceso preventivo de emergencia para ajustar a la compañía de forma extrema.
Tras finalizar las negociaciones esta noche, las autoridades de Aerolíneas parecen haber llegado a un acuerdo que se oficializará en las próximas horas desde el Gobierno nacional.
Según trascendió, el acuerdo por los reclamos salariales, que comenzaron la semana pasada, con la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA) implican las siguientes condiciones: la renuncia a pasajes en clase ejecutiva, renuncia a asientos de descanso en ejecutiva, renuncia al día libre obligatorio en cumpleaños, renuncia a hora de tiempo de servicio desde que se suben al remis y la reducción del uso de los mismos transportes.
A su vez, con la Asociación Argentina de Aeronavegantes (AAA), se habrían acordado puntos similares a los de APLA, con la suma de la posibilidad de tener vuelos en todas las zonas y aviones, y de realizar venta a bordo de productos.
En el caso de que los gremios acepten de manera oficial estas condiciones, el Gobierno estaría dispuesto a dar el aumento salarial mayor al 14%.
Finalmente, desde la Asociación del Personal Aeronáutico (APA) aceptarían el Self Bag Drop, un servicio de autoservicio que permite a los pasajeros enviar sus maletas directamente al vuelo a través de máquinas integradas en el mostrador de servicio, y el auto Check-in en terminales.
Además, también aceptarían la prestación de servicios a terceros y la polifuncionalidad en hangares y en servicio, que durante años se negaron a aceptar.