Después que el presidente Javier Milei decida echar a Thierry Decoud del cargo de interventor de Yacimientos Carboníferos Río Turbio (YCRT) durante la mañana, este mismo martes se difundieron los audios que derivaron en la destitución y la polémica.
Decoud ahora se enfrenta a una investigación por presunto pedido de coimas en una operación de compra de 30.000 toneladas de carbón. La empresa israelí TEGI Limited, que habría ganado la licitación, está implicada en este escandaloso caso.
A su vez, se conoció que el interventor mantenía una relación cercana Andrés Gross, uno de los brokers involucrados en la negociación. En uno de los audios, se escucha una charla entre Juan Agustín Yarke Ariet, representante de TEGI, y Gross: “Vos me estás pidiendo que tengamos transparencia, si vos no me decís tu nombre completo, entonces estamos empezando mal”. Gross, algo molesto, respondió que hablar con nombre y apellido “no cambia nada”.
Más adelante, el representante de TEGI aclaró que ya tenía contacto directo con YCRT, sin necesidad de intermediarios, y añadió que su vinculación con la operación venía a través de Paula, una representante de Cancillería, quien le presentó el producto directamente a Israel: “Nosotros tenemos contacto con YCRT por puente diplomático hace muchísimo tiempo. El motivo por el cual estamos realizando la operación ahora es directamente por Cancillería”, dijo.
Así mismo, detalló: “Alejandro Salemme (cercano a Gross) me convocó inicialmente para trabajar con ustedes, yo le dije, y fue muy claro, que ya tengo contacto con YCRT, yo tengo contacto directo con el Estado, no necesito que alguien me haga de intermediario para poder acceder al producto de YCRT. En última instancia, si vos formás parte del equipo de YCRT y tenés contacto con el que firma eso, deberías decirles: ‘che, mirá, a mí me gustaría recibir una contribución marginal por parte de la venta’, pero por parte de la compra nosotros continuamos haciendo ese proyecto”.
Gross se quejó durante el audio por el accionar del representante de la empresa: “Yo te dije que la gente que está ahora es la que va a estar y es con la que podemos hacer negocio y cerrarlo. Y ahí quedó la conversación porque vos me dijiste que iba a ir por otro lado”
A lo que Ariet respondió: “Me lo están solicitando a mí directamente por puente diplomático. Directamente me llamó Paula de Cancillería para decirme, ‘Agustín, tenemos este producto para comerciar con ustedes’ se lo presentaron directamente a Israel y a mí no me dejaron otra opción. Si te fijás, ni siquiera soy yo quien realiza la oferta, siendo que soy yo en Argentina quien tiene la posibilidad y la autonomía de poder anularlas. Yo lo único que hago, y eso ustedes lo pueden auditar si realmente están dentro de la empresa, es reenviar la solicitud y aclarar las condiciones comerciales en base al conocimiento de las condiciones de producto. Que ahí sí intervengo yo y hago las observaciones necesarias para resguardar los intereses de mi compañía. Fuera de eso, la verdad es que creo que alguien que está formando parte, que tiene estructura dentro de la compañía, me esté llamando para decirme que tengo que ir por esas vías”,
Gross vuelve a responder y menciona nuevamente a «Alejandro»: “Yo nunca dije que estaba dentro de la compañía, porque es una compañía estatal. Las compañías estatales no pagan comisiones de ningún tipo a nadie, ni a vos, ni a mí, ni a nadie. Es un tema político, como bien dijiste. A mí me llamó Alejandro y me pidió el ok del que firma, del que decide. Los pongo en contacto, dicen por diferentes motivos que no van a avanzar y dos meses después mandan una orden de compra y no me avisan”, afirmó.
A su vez, Ariet se mostró molesto debido a que la empresa “filtró información” y aseguró que es “comercialmente violento”, especialmente por la intervención de Gross. Así mismo, ratificó que su empresa no pidió el contacto de nadie y no se acercó para solicitar el producto.
“Esta negociación se encuentra ahora en esta instancia y que tengamos que ir a un cuarto intermedio para avanzar. Nosotros no solemos proceder así de esta forma y me llama la atención que una empresa de envergadura de carácter estatal divulgue información hacia una persona de reventa para que después venga a decirme ‘che, si yo no estoy dentro del negocio, no se cierra’. Quiero que sepas que para mí no es una forma amigable. Es más, como te lo dije, me parece comercialmente agresivo, pero yo no soy quien toma la decisión final acá. La va a tomar el presidente de mi compañía. Tengo la capacidad de veto, pero no la voy a utilizar. Simplemente voy a poner la situación para ver de cómo podemos sacarle el negocio adelante”, cerró Ariet.
“Te pido que hay información muy sensible, que la manejes de una manera con mucha cautela. Si no tenía absoluta confianza cuando me dijo Alejandro, ni me metía y ni exponía a nadie. Entonces, lo que te pido es que mantengamos esto de una manera muy sensible”, sentenció Gross