El Gobierno libertario no esconde por esta horas su satisfacción por el vínculo que viene construyendo con el líder del sindicato de Camioneros, Hugo Moyano, lo cual derivó en un reciente giro del gremialista, adaptándose a la pauta salarial que promueve el oficialismo y aislando a su hijo Pablo, quien promueve el conflicto con Javier Milei.

En un principio, Moyano quería un acuerdo salarial trimestral del 15%, que luego terminó bajando al 5,5%, mucho más en línea con la postura de la Casa Rosada. «Es un tremendo mensaje al resto de los gremialistas, de que un sindicato de semejante peso firme una paritaria de estas características», destacó una alta fuente del Gobierno en declaraciones a #BORDER.

Por estos días, el Gobierno viene hablando con varios popes sindicales para que se moderen y adapten sus pedidos salariales a la caída de la inflación que se viene registrando y que «está tendiendo a cero», reveló la misma fuente. Haber conseguido que Hugo Moyano se anotara en esa lista, no siendo de los dirigentes más «dialoguistas», significó una «cucarda» para colgarse.

Consultado sobre los motivos para que Moyano adoptara esa postura, el integrante del Gobierno respondió: «Creo que esto se debe a la edad que ya tiene y a las ganas de ver que algunas vez este país mejore en serio, eso lo llevó a cambiar algunas cosas. También es muy importante la influencia de sus hijos menores, Huguito y Gerónimo», explicó.

A tal punto llegó a construirse este buen vínculo, que Moyano en los últimos días de diciembre llamó al secretario de Trabajo, Julio Cordero, solo para saludarlo por fin de año. «Le suena el teléfono a Julio y del otro lado escucha: ‘hola soy Huguito te voy a pasar con mi papá que te quiere saludar por Año Nuevo'», reveló la fuente.

Algo muy diferente a la postura de Pablo Moyano hacia Cordero, que era de hostilidad. Cuando se consultaba al hijo mayor de Moyano sobre qué pensaba sobre el titular de la cartera de Trabajo, solía bramar: ¿Qué podes esperar de un abogado de Techint?«, en referencia al pasado del funcionario como representante de la compañía de Paolo Rocca.

Huguito es el abogado de Camioneros y Gerónimo es el más chico del clan Moyano. Son los hijos que actualmente tiene mayor llegada al padre. Con el ex diputado y ex titular del sindicato de Peajes, Facundo Moyano, hay un poco más de distancia. Y con Pablo hay prácticamente una ruptura, que lo llevó a dejar su lugar en el triunvirato de la CGT y a quedar algo raleado en Camioneros.