Durante el mediodía de este miércoles estalló una nueva polémica por el aumento de las dietas de los senadores, que iban a alcanzar en mayo los $ 8 millones en bruto. Finalmente, decidieron dar marcha atrás a través de un documento dirigido a Victoria Villarruel y continuar con el salario actual.
El texto fue firmado por todos los jefes de bloques del recinto y pedía a Villarruel que no se perciba el incremento que fue asignado previamente a los empleados estatales, a quienes se atan las dietas de los legisladores. La información fue dada a conocer por Clarín.
Si esta suba se hubiera concretado, habría sido el segundo en menos de un mes y rozarían los $8 millones de salario bruto, o 5 millones en mano.
EL AUMENTO QUE NO FUE
Según un documento acordado entre los senadores y Victoria Villarruel meses atrás, serán 13 aumentos de la dieta al año. Cada una equivalente a 2500 módulos más un adicional de 1000 módulos por gastos de representación y 500 módulos de adicional por desarraigo.
Fuentes cercanas a la vicepresidente Victoria Villarruel, habían explicado que para evitar la suba tenían que ser los propios senadores los que cambien el método de aumento ya que lo de hoy se trataba de un acuerdo en el que no se puede intervenir.
El Dietazo
El pasado 18 de abril, el Senado de la Nación aprobó con una votación sin debate un proyecto de resolución por el cual se aumentaron las dietas a partir de mayo. El sueldo de los legisladores de la Cámara Alta pasó de 1,7 a 4 millones de pesos. Aquella iniciativa fue propuesta sobre tablas por el senador salteño Juan Carlos Romero, en concordancia con otros bloques.
