El gobernador de Río Negro, Alberto Weretilneck, experimentó un giro inesperado en su rutina al acudir a un chequeo coronario de prevención el pasado lunes. Lo que inicialmente se planificó como un procedimiento de control se convirtió en una intervención más significativa, ya que se le diagnosticó una obstrucción parcial en la arteria circunfleja, lo que requirió la colocación de un stent. Fuentes provinciales confirmaron que la operación fue exitosa, y el gobernador se encuentra en fase de recuperación en el centro de salud.

En un comunicado emitido por los directores de la institución de salud, Demetrio Thalasselis y Alejandro Schroeder, se detalló que la «angioplastia trasluminal con colocación de stent» transcurrió sin complicaciones y que el gobernador permanecerá en observación durante 24 horas en la Fundación Médica de Río y Neuquén.

La Gobernación expresó su agradecimiento al equipo médico y aseguró que la comunidad será mantenida informada sobre la evolución del estado de salud del mandatario provincial. Este sorprendente episodio ha generado preocupación entre los ciudadanos, pero también destaca la importancia de someterse a controles médicos preventivos.

Este inesperado suceso también resalta la necesidad de concientización sobre la importancia de los chequeos médicos periódicos, incluso para aquellos que no presentan síntomas evidentes. La detección temprana de problemas cardíacos puede marcar la diferencia en el tratamiento y la recuperación.

A medida que Weretilneck se recupera, se aguarda un nuevo parte médico para concoer detalles sobre su salud. La colocación exitosa del stent ofrece perspectivas optimistas para su recuperación y refuerza la importancia de la atención médica preventiva en la vida de todos.