El papa Francisco recibió ayer a Anita Fernández, hija de Ana María Careaga, secuestrada durante la dictadura militar cuando estaba embarazada de ella, y nieta de Esther Balestrino de Careaga, quien fuera una de las víctimas de los vuelos de la muerte tras haber sido desaparecida a partir de la infiltración de Alfredo Astiz. Se trata del ex represor al que varios diputados de La Libertad Avanza visitaron en Ezeiza recientemente, junto a otros ex condenados por delitos de lesa humanidad.
El Instituto Espacio para la Memoria emitió un comunicado en la charla que tuvieron en la residencia de Santa Marta, en Roma, “el Papa le manifestó que se había enterado de que unos diputados habían visitado a Astiz, que estaban queriendo que no estuvieran presos y que eso era algo muy peligroso”.
“No aflojen, conserven la memoria de lo que han recibido, no solo de las ideas sino de los testimonios, ése es el mensaje que les doy en este día”, dijo Francisco, de acuerdo con el video que se difundió en las últimas horas. En la entrevista Francisco también “recordó con admiración a su amiga y compañera Esther Balestrino de Careaga -quien fuera su jefa en un laboratorio de análisis clínicos-, y dijo que de ella había aprendido su amplitud política, entre otras palabras afectuosas”.
Según el Instituto, las palabras del jefe de la Iglesia Católica constituyen “una clara respuesta a la ofensiva contra la memoria”.
Este encuentro ocurre en medio de la controversia que sacude a la Cámara Baja, debido al reciente encuentro de seis diputados nacionales que pertenecen a La Libertad Avanza con condenados por delitos de lesa humanidad en la cárcel de Ezeiza, entre ellos, nada menos que Astiz.
Ayer la Cámara de Diputados no logró quórum para discutir y aprobar un proyecto para condenar la visita. La oposición responsabilizó a la Libertad Avanza por el fracaso de la sesión. El presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem, habilitó expresiones de minoría, durante las cuales la mayoría de los presidentes de bloque cuestionaron fuertemente al oficialismo por este hecho.
Quién fue Astiz
Alfredo Ignacio Astiz fue un militar argentino perteneciente a la Armada que tuvo una fuerte participación durante los crímenes de lesa humanidad durante la última dictadura militar. Astiz tuvo un rol clave en el secuestro de tres madres de Plaza de Mayo, dos monjas francesas y varios militantes en diciembre de 1977. Varios secuestrados fueron arrojados vivos al mar desde el aire, en lo que se conoce como “los vuelos de la muerte”.
El entonces teniente de fragata Astiz había simulado ser hermano de un desaparecido. A lo largo de varios meses logró ganarse la confianza de las madres que se reunían en la Iglesia de la Santa Cruz, del barrio porteño de San Cristóbal. Entre las personas secuestradas estaba Esther Ballestrino de Careaga. Ana María Careaga es la tercera hija de Esther y tenía 16 años cuando se llevaron a su madre. Astiz fue condenado por estos crímenes y se encuentra cumpliendo su condena en Ezeiza.
