La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, denunció al barrabrava de Boca Rafael Di Zeo por «intimidación pública» tras haberla amenazado mediante un audio de WhatsApp, a raíz de que se negara el acceso de dos hinchas a las canchas por los incidentes en el partido ante Gimnasia en Santa Fe.
«¿Qué quiere? ¿Que vayamos a la guerra? Vamos a la guerra», sentenció el barra xeneize en el mensaje grabado, además de asegurar que está dispuesto a «hacerle quilombo» al Gobierno por las sanciones aplicadas.
Ante eso, la funcionaria escribió en sus redes sociales: «Di Zeo, a mí no me amenaza nadie. Ahora no solamente tenés restricción para entrar a las canchas, sino que te hacemos una denuncia penal por amenazas e intimidación pública».
Previamente, el fallo del Ministerio de Seguridad de La Nación contra los barrabravas Fabián «Topadora» Kruger y Fernando «Lana» Gatica generó la reacción de Di Zeo, ya que se trata de los principales allegados que tiene el jefe en la hinchada.
En el audio, Di Zeo reveló cómo otras veces pactó la entrega de hinchas al derecho de admisión para evitar que salieran perjudicados los barras que «se hacen respetar». «Si no están ellos, vamos a tener quilombo. Se van a empezar a pelear por el poder los pendejos», sostuvo.
«Antes de hacer algo, me tenés que decir ‘Flaco, mirá, tengo que meter tres derecho de admisión’. Yo te doy los nombres, boludo», manifestó.
En el audio de casi tres minutos, advirtió que si Patricia Bullrich sigue «haciendo lo que ella quiere de esa manera», desde la barra xeneize van a pegarle a los del Ministerio cuando vayan a la cancha. «Si ella quiere jugar a esto, jugamos esto, boludo. A mí me gusta más el quilombo que entrar a la cancha», avisó.
Tras eso, la cartera difundió un comunicado, que sostuvo: «La denuncia, presentada en el día de hoy, se basan en los audios difundidos en las últimas horas en los que se escuchan amenazas de Di Zeo dirigidas a la ministra Patricia Bullrich e integrantes del Ministerio de Seguridad. Las amenazas surgen luego de que las autoridades decidieran impedir el acceso a los estadios a los barras con responsabilidad en los disturbios del último encuentro entre Boca y Gimnasia».