La administración de Javier Milei avanzaría en los próximos días a través de un decreto con la eliminación de los programas sociales, las obras públicas y las capacitaciones que dependen de la Subsecretaría de Turismo. La iniciativa hará cambios a la Ley Nacional de Turismo.
La norma hasta el momento establece que la Secretaría tiene la obligación de elaborar un Plan de Turismo Social y promover "la prestación de servicios accesibles a la población privilegiando a los sectores vulnerables".
La Secretaría de Turismo que está bajo la órbita de Daniel Scioli tiene un presupuesto de $65.909 millones y deriva $7.475 millones para el desarrollo del Plan Federal del Turismo Social. Tiene a cargo los complejos turísticos de Chapadmalal (provincia de Buenos Aires) y de las sierras de Embalse (Córdoba), que se ofrecen con ese propósito.
Los programas sociales de Turismo incluyen pensiones completas (desayuno, almuerzo y cena, sin bebidas) y simple (solo alojamiento). Cuenta además con hoteles de categoría A, que contemplan un baño compartido entre dos habitaciones, y B, que tienen baños compartidos.
Mientras que la estructura de Embalse abarca siete hoteles y 50 casas con capacidad para 3000 plazas, la unidad de Chapadmalal cuenta con nueve hoteles y edificios complementarios para la administración, servicio médico, servicios generales y pabellones para el personal.
El Gobierno eliminará además el plan de inversión de obras para fines turísticos y transferirá el rol de fomento y de investigación a las provincias. También busca eliminar el Observatorio de Turismo Social y las facultades de Turismo para instalar oficinas en el exterior, al considerar que eso es menester de la Cancillería
A su vez, quieren dar de baja la concesión de créditos de Turismo "para la construcción, ampliación o refacción de infraestructura turística", según establece la actual norma.