A horas de la primera de las treinta marchas que planteó el oficialismo en el marco de su campaña electoral, Guillermo Dietrich, ministro de Transporte de la Nación, conversó con María Julia Oliván en #BORDERPERIODISMO, por Radio Nacional, sábados de 7 a 10AM. Las obras, el costo de apostar a “los cimientos” a pesar de que “no rinde políticamente”, el fallo contra el funcionamiento del aeropuerto de El Palomar, la violencia en la política y los cortes de boleta de los intendentes fueron los ejes más interesantes de una charla que se extendió veinte minutos. 

Estas son las frases destacadas:

Las marchas arrancan por Belgrano, porque el viaducto del Mitre fue una obra muy importante y nos mostró hay cosas que parecen imposibles que se pueden hacer. Hacía cien años que no se hacía un viaducto ferroviario en Buenos Aires y ya terminamos dos y estamos en obra con un tercero en el Belgrano Sur. Trabajando con honestidad se pueden hacer cosas que tienen altísimo impacto en la vida de la gente. 

Esta mañana pasaba lo mismo con vecinos de Merlo y La Matanza que, después de décadas que se haya prometido, inauguramos el primer tramo del tercer anillo del conurbano, que es la continuación de la autopista del Buen Ayre que conecta con la Ruta 2, es decir, que te uno La Plata con Pilar. En ese entorno viven 12 millones de personas y en un viaje de La Plata a Pilar se va a ahorrar una hora cuando se termine en 2021. Es una obra monumental. Hace décadas que no se hace una autopista en el área metropolitana desde la nada.

Va a ser una elección totalmente distinta. El 27 de octubre estoy seguro de que vamos a ir a un balotaje

No soy el organizador de la campaña, estoy ayudando en la organización de la fiscalización. La campaña la lidera Marcos Peña, todos ayudamos y hay un equipo muy grande, pero mi rol específico en este punto respecto a ésto es ayudar a organizar la fiscalización.

Yo creo que hay dos planos que son independientes y los dos, igual de importantes, No hay ningún país que se pueda desarrollar sin tener infraestructura. Y por eso tenemos los planes que tenemos y es uno de los cambios profundos que propusimos para Argentina, porque en las últimas décadas se pensó siempre en el corto plazo y nadie encaró obras de magnitud por la corrupción que había históricamente en la obra pública y porque para haber infraestructura debe plantearse un federalismo en serio, al margen de la buena o mala relación que tengas con el gobernador. 

Podemos hacer cosas que tienen altísimo impacto positivo en la gente. Vamos dando pequeños y medianos pasos para que la gente esté mejor y tenga mayores oportunidades

Hay un montón de valores detrás de lo que ha avanzado este Gobierno en federalismo, pelea contra la corrupción, transparencia y trabajar en los cimientos, que a veces no pagan políticamente y por eso muchos no los hacen. Eso explica por qué los trenes de carga pasaron 80 años degradándose. Porque hacés una obra del tren y no se entera nadie.

Apostar a la infraestructura no genera una reactivación de un día para el otro. Hace cuatro que estamos invirtiendo 3 mil millones de dólares y los beneficios del tren en serio van a llegar en dos o tres años. Son procesos largos que, por ejemplo, Chile lleva haciendo hace 20 años.

Por el otro lado, en una Argentina que tiene desequilibrios que llevan muchísimo tiempo porque nunca nadie se había ocupado en resolverlos, como los de la macroeconomía, el déficit fiscal y de las causas de la inflación. Y en eso trabajamos pero la gente está haciendo un esfuerzo enorme y en un momento dijo: ‘no, hasta acá yo llegué’. Pero ante eso sería un error monumental para nuestro país que digan que el metrobús por ejemplo no sirve, porque lo que sirve es otra cosa, como que haya veranos de bolsillo para la gente y que con eso alcance, mientras en lo profundo nos vamos degradando sistemáticamente, que es lo que venía pasando.

Hace cien años que no se hacía un viaducto en Buenos Aires, inauguramos dos y estamos con el tercero que es Belgrano Sur

Creo que haber encarado las cosas de forma totalmente distinta es el resultado de la cantidad de gente que sentimos movilizada, la que vimos en la Plaza de Mayo y veremos hoy.

No tengo expectativas de números para la convocatoria de la marcha de hoy pero sí sé que hay millones de personas que le piden a Mauricio que no los deje solos. Esa pelea de valores, de pararse ante el narcotráfico, ante la prepotencia, antes las mafias que hay en muchos lugares en todas las provincias donde no se respeta la dignidad de la gente creo que es la causa por la cual va a haber una elección distinta en octubre y vamos a ir a un balotaje.

No evaluamos plantear un juicio político ante la jueza por lo sucedido en El Palomar, porque esto es una primera instancia, pero el fallo es una aberración. Y aún peor cómo se genera esto.

Hoy en El Palomar, que es una ciudad aeronáutica, si les preguntas a los vecinos, 9 de 10 personas te van a decir que no le molestan los ruidos, sino que están felices con el aeropuerto porque hasta generó empleo, desde el vamos con las líneas más de mil personas, la mayoría de la zona. Los taxistas y los remiseros son beneficiados, los comercios mejoraron sus ingresos.

Desde el primer momento han intentado frenar el aeropuerto de El Palomar, nunca lo lograron si bien la jueza ya nos había puesto una restricción ridícula de tres vuelos por día. Después fue a la Cámara y se canceló.Pero ahora lograron hacer este daño tremendo que empezó a regir el jueves y que ya hizo que se cancelen muchos vuelos, principalmente entre puntos del interior del país, en otro efecto del unitarismo que agobia al federalismo.

No evaluamos plantear un juicio político ante la jueza por lo sucedido en El Palomar, pero el fallo es una aberración

Un señor Marisi, con su abogado, intentó siempre parar el funcionamiento de El Palomar con.múltiples excusas, desde que había temas de desaparecidos, que las pistas eran chicas, que los aviones tiraban aceite, que había temas ambientales y nunca lo lograron. Este señor recusó 17 veces a la Cámara y es gente que lo único que tiene que hacer es complicarnos la vida a nosotros. Hay gente sumamente maliciosa que, por cuestiones políticas, en vez de seguir el juego democrático y plantear en elecciones que no quieren aviones van buscando estos atajos y van lamentablemente encontrando aliados que en cualquier lugar del mundo con cierta racionalidad no sacarían fallos así.

La gente está haciendo un esfuerzo enorme y en un momento dijo: ‘no, hasta acá yo llegué’

En el caso hipotético de no ganar las elecciones, no tendría por qué caminar los pasillos de Tribunales en el futuro, todo lo que hicimos fue totalmente transparente. Uno esperaría que se haya aprendido del pasado y si pasara algo que no creo que va a pasar, como que ganara el kirchnerismo no haya persecución judicial. Creo que parte de lo que moviliza a la gente a nuestro favor son los miedos de volver a una Argentina donde no se respiraba libertad. Hoy se vive en una Argentina con tolerancia pero hay grupos intolerantes que quieren que en nuestro país se diriman las cosas por la violencia, hasta en sectores sindicales. Creo que hay un amplio rechazo a eso incluso en gente que no nos votó.

En vez de seguir el juego democrático y plantear en campaña que no quieren aviones algunos van encontrando estos atajos como el fallo contra El Palomar

Hay mucha campaña sucia sobre el corte de boletas de los intendentes. Me mandaron el cartel del intendente Diego Valenzuela, me comuniqué con él y me dijo que lo estaban poniendo desde la oposición para dar a entender que hay ruidos internos. No diría que todos los casos son noticias falsas pero al menos en Tres de Febrero me consta que lo es.

Somos un espacio muy sólido, desde Lilita Carrió hasta Cornejo. Puede haber miradas distintas en temas pero eso no significa que haya ruido interno. Y no nos peleamos. Discutimos sobre temas en un país donde el disenso en la política no tuvo lugar. Respetamos el disenso, afuera, con los medios de comunicación, y también adentro. Y eso la gente también lo valora.

No tendría por qué caminar los pasillos de Tribunales en el futuro, todo lo que hicimos fue totalmente transparente.

En una próxima vida mi sueño sería ser un jugador de rugby. Hasta en un punto, del rugby me conmueve ese esfuerzo que hacen Los Pumas, el respeto a las normas, el trabajo en equipo, el que en general no hay excusas y sí reconocer qué hay que mejorar. Son valores muy importantes para el momento que estamos viviendo en Argentina. Y en un ratito, lo llevo a mi nene a jugar.

Escuchá de nuevo la entrevista entera: