Mundial: ¿Por qué tenemos a los mejores y no somos (ni lejos) lo mejor?

Por: #BorderPeriodismo

El periodista Dante Panzeri inmortalizó una definición del fútbol. Lo llamó la “dinámica de lo impensado” Quizá en esa frase yace el encanto de este deporte en el que cualquier objetivo es posible, en el que el todo y las partes se funden en un cuerpo colectivo que potencia al jugador y al equipo.

Por Federico Delgado

Pensemos en Maradona y las selecciones mundialistas de 1986 y 1994. El fútbol gira en derredor de potencias individuales que componen un sujeto diferente: el equipo.

No obstante al interior de esa noción hay matices, estilos, escuelas y sistemas. Podríamos elegir un par de díadas Menotti versus Bilardo o el Barcelona y el Atlético de Madrid del “Cholo” Simeone. Cualquiera de los casos citados, más allá de los gustos personales, se refieren a equipos exitosos que lograron combinar dos ingredientes básicos de cualquier proceso colectivo: *que cada actor de lo mejor de sí y * que ese rendimiento aumente la expresión del equipo. Esta síntesis de elementos no es patrimonio exclusivo del fútbol, la tensión entre lo uno y lo múltiple estructura las sociedades humanas. El problema del ser absoluto de Parménides y del múltiple y cambiante devenir de Heráclito ocupó a Platón ¿Cómo conciliar lo absoluto con la fluctuante realidad material?

Respondió, básicamente, través de dos conceptos: El mundo inteligible, el verdadero, de las ideas y el sensible, el cambiante. Este adquiere su ser al participar de las ideas verdaderas. Esto significa que nuestro mundo material imita a las ideas verdaderas. Así ambos mundos se concilian. El razonamiento de Platón es más complejo y atrapante. Sin embargo, casi heréticamente, podemos coquetear con que la relación entre un equipo y el jugador es similar.

La idea del equipo necesita expresarse en los jugadores. Si esa afección fluye el fútbol se transforma en la dinámica de lo impensado ¿Por qué? Porque el juego se transforma, de nuevo Platón, en poiesis: “la causa que convierte cualquier cosa que consideremos de no-ser a ser” Tanto el tiki tiki, como la táctica especulativa y conservadora requieren de creación que, a su vez, se alimenta de trabajo, entrenamiento, pasión, concentración e improvisación.

La pregunta se impone ¿Qué pasa con nuestra selección?

No podemos responderlo en términos técnicos. De todas formas nos hace ruido que pese a los talentos que forman el plantel no hay equipo ni brillo individual. Y aquí nos parece que podemos trazar un paralelismo para pensar en otras dimensiones desde el fútbol, para el fútbol y respecto a la organización social.

En efecto, queremos un equipo que brille. Para ello se debe conciliar lo uno y lo múltiple. Pero quienes deben hacerlo viven en esta sociedad. Una sociedad edificada en base a valores que poco tienen que ver con aquella fusión del todo que preserva la singularidad de las partes, porque los valores que cimentan esta sociedad son los del neoliberalismo: el egoísmo, el éxito individual, la competencia hacia el otro, el estado de guerra latente; es decir, un imaginario creado a partir de límites negativos, en el que el otro lejos de ser un complemento se transforma en un elemento hostil hacia el éxito individual.

Es difícil, entonces, hacer realidad la definición de Panzeri, porque ella requiere una apuesta hacia el otro diferente, una apuesta hospitalaria en la que el compañero es una posibilidad de aumentar la potencia individual. A lo mejor aquí yace al menos una dimensión del drama ontológico de nuestra selección: esperamos un producto sin los ingredientes adecuados. La evidencia más fuerte de ello ocurrió en el partido con Irán, en el que un flash de Messi, un efímero éxito individual se festejó como un logro colectivo. Quizá el remedio para esta paradoja se aloja en la rebeldía, en la capacidad de los hombres para instituir un nuevo equipo –mundo-, que reemplace al instituido.

Suscribite a nuestro newsletter
* Recibirás emails de cada publicación semanal
Notas relacionadas
Buscar
Cerrar este cuadro de búsqueda.
Con tu suscripción al Newsletter de Border Periodismo recibirás emails de cada publicación semanal.
* Recibirás emails de cada publicación semanal