El gobierno de la provincia de La Pampa anunció este lunes que utilizará la ivermectina en pacientes con Covid-19, aunque la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT) no la aprobó como método de tratamiento.
«Para el jueves de la semana próxima, si no hay inconvenientes de logística, vamos a contar con el medicamento para iniciar el tratamiento», indicó Mario Rubén Kohan, ministro de salud de la provincia. De esta manera, La Pampa se suma a las provincias de Misiones, Chaco, Corrientes y Tucumán en suministrar este fármaco.
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¿Qué es la ivermectina?
Se trata de una droga antiparasitaria muy antigua que se utiliza tanto en medicina humana como animal.
En octubre, la Sociedad Argentina de Infectología (SADI) señaló que «es un potencial inhibidor de la replicación vidal del SARS-CoV-2», pero que «para alcanzar niveles efectivos de ivermectina se necesitarían importantes aumentos y potencialmente tóxicos de la dosis».
En el anuncio oficial, Kohan citó un estudio realizado en nuestro país a 45 pacientes, cuyas conclusiones indican que el virus se elimina más rápidamente cuando el remedio se empieza a tomar por lo menos cinco días antes del inicio de los síntomas.
En otro trabajo, los doctores Héctor Carvallo y Roberto Hirsch concluyeron que la droga es un método adyuvante en la profilaxis del Covid-19, y recomendaron extender su uso a los grupos vulnerables de la población. El trabajo, que se divulgó en la revista científica Microbiol Infect Dis, contó con la participación de 162 personas que recibieron 0,2mg por Kg de peso de ivermectina. Hasta el momento, no se registraron contagiados en el período de la investigación (1 de junio y 15 de diciembre de 2020).
En el Reino Unido también se investigó sobre la eficacia de la ivermectina. Se trata de un metaanálisis realizado por médicos de cuidados intensivos, que arrojó que la ivermectina es un medicamento esencial para disminuir la morbilidad y mortalidad producida por la infección por COVID-19.
El muestreo incluyó 2045 personas, de las cuales 1835 eran positivos. La mortalidad se redujo entre el 65% y el 92%. En el caso de quienes lo tomaban de manera preventiva (personal de salud), la infección bajó entre un 82% y 92%.
