Stevie Wonder, uno de los músicos más influyentes del siglo XX, perdió la vista a los pocos días de su nacimiento, que se produjo seis semanas antes de lo previsto.
Stevland Hardaway Morris, tal su nombre real, fue diagnosticado al nacer con una retinopatía del prematuro, un trastorno ocular que ocurre por el crecimiento anormal de los vasos sanguíneos de la retina.
Con el objetivo de mejorar su condición, sumado al pequeño tamaño de su cuerpo, Morris fue puesto en una incubadora, donde quedaría completamente ciego por la gran cantidad de oxígeno que recibió en ese lugar.
A pesar de su condición, el pequeño Stevie siempre persiguió sus sueños, y a los diez años, ya sabía tocar múltiples instrumentos, incluido el piano: «Soy capaz de usar mi imaginación para ir a lugares, para escribir palabras sobre lo que he escuchado que la gente habla. En la música y en la ceguera, soy capaz de asociar lo que la gente dice con lo que hay dentro de mi«, señaló Stevie.
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Nacido un 13 de mayo de 1950, el artista nacido en Michigan y crecido en Detroit, cumplió este viernes 71 años. A lo largo de su frondosa carrera, Wonder vendió más de 100 millones de discos, fue galardonado con 25 premios grammy y es considerado una leyenda de la música popular.
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