Valentín tiene 17 años, diagnosticado desde pequeño con TDAH, tuvo que ser internado para recibir contención terapéutica y en salud mental. Eso, en los papeles. Porque Valentín está internado –atado – en el Hospital Churruca, en el barrio porteño de Parque Patricios hace siete meses, y no recibe el tratamiento.
“Estamos acá hace siete meses, en el sector de proctología. A Valentín no le pueden dar el alta porque no tienen donde mandarnos. Tampoco lo puedo llevar a casa porque tiene brotes. El no recibe asistencia en salud mental en este hospital porque no tienen psicólogos o psiquiatras que atiendan a niños o adolescentes”, relata angustiada su mamá, Natalia Barrientos.
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Ella hace responsable a la obra social del personal de la policía federal por la desidia y el abandono de persona y cuenta: “No les importa la salud de mi hijo. Es más, me dicen que no va a salir adelante. Que ya no hay cosas por hacer”, lamenta.
“Nos maltratan, nos destratan. Acá a las personas que vienen con algún trastorno que tiene que ver con alguna discapacidad las denigran”, denuncia.
El adolescente llegó a la guardia del nosocomio que tiene en la Ciudad de Buenos Aires la obra social del personal de la policía federal y nunca más salió. “No le quieren dar una salud mental digna. Ellos no quieren que estemos acá, pero tampoco proponen una solución para que Valentín pueda recibir la asistencia que necesita. No puede estar en casa, tiene que tener supervisión y mientras tanto, terapias complementarias”, detalla Natalia.
@borderperiodismoCHICO CON TDAH ATADO EN EL CHURRUCA♬ sonido original – #BORDER
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“Pablo Farina es el director médico del Hospital Churruca, a él le pido que por favor apruebe el traslado a un centro donde tengan profesionales en salud mental. Acá no lo atienden. Mi hijo llora todos los días. Él sabe que tiene que seguir rehabilitándose, pero acá no lo hacen”, resume Natalia.
“Si recibiera la terapia que necesita, saldría adelante. Es un chico, tiene toda una vida por delante. No quiero que este así. El merece un tratamiento. Sufrió mucho, sufre ahora estando atado, internado hace meses. Esto no ayuda a su situación, y pasa el tiempo y es peor”, sostiene la mamá de Valentín.
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