En medio de la agitación política y económica que vive el país, el presidente Javier Milei, lejos de intentar llevar calma, continúa con su derrotero de agresiones. En este caso fue el turno de Ricardo López Murphy, a quien tildó de «traidor de las ideas de la libertad» y lo acusó de colaborar con una agenda socialdemócrata. «¡Una verdadera basura disfrazada de liberal!», fue la calificación que usó Milei al referirse al diputado de Hacemos Coalición Federal.
El presidente Javier Milei participó el lunes del décimo aniversario del Club de la Libertad en Corrientes, y ante un pequeño grupo de seguidores manifestó -sin que nadie le preguntara – su impresión sobre la figura de «otro de los miembros» del club, Ricardo López Murphy.
Con adjetivaciones subidas de tono, el primer mandatario calificó al diputado nacional de «traidor y chanta» y pidió a los integrantes de la asociación que empiecen a dilucidar quiénes son verdaderos liberales. Ante la cantidad de agravios, López Murphy no se quedó atrás y contraatacó comparando las palabras de Milei con las retóricas empleadas por líderes autoritarios como Fidel Castro y Cristina Kirchner y calificó las acusaciones de Milei como «tremendamente desafortunadas», según declaró en conversación con BORDER.
«No hace bien a nadie que se animalice a los adversarios», afirmó López Murphy, destacando la necesidad de un diálogo constructivo y respetuoso en la esfera política. Además, rechazó las descalificaciones de Milei hacia el Congreso, argumentando que tales actitudes no contribuyen a un gobierno exitoso en Argentina.
El diputado de Hacemos Coalición Federal sostuvo que el presidente «no puede estar enfrentado con los gobernadores, con el Congreso, o como hacía el Gobierno anterior, hacerle juicio a la Corte Suprema. Eso no corresponde, no son las prácticas de la República”.
Y aseguró, en conversación con el conductor Eduardo Feinmann: «Voy a continuar haciendo lo que estaba haciendo. Se va a ver mi templanza y mi espíritu constructivo. Si alguien tiene que guardar la compostura y los límites es el que ejerce la presidencia. Pero espere de mi una actitud muy cuidadosa de no hacer que los agravios prevalezcan por sobre lo que tenemos que hacer en la República, que ya de por sí es muy difícil”, resumió el legislador.
