La Provincia de Buenos Aires informa en el Área Metropolitana 15 mil camas hospitalarias de las cuales 2500 son de Unidad Terapia Intensiva (UTI). La ocupación y la disponibilidad de internar es la principal preocupación ante la pandemia de coronavirus, tras las experiencias en países como Italia, España o Chile, cuyos sistemas sanitarios se vieron colapsados y las muertes se dispararon.
“La ocupación está en el 58% dentro del Conurbano. Este dato varía de manera diaria por las altas a los pacientes y las derivaciones que se producen”, afirma Juan Sebastián Riera, director de Hospitales de la Provincia de Buenos Aires
El porcentaje va en aumento. El primero de junio se encontraba en 55%, según informó Provincia en su Twitter, con 1400 camas ocupadas en cuidados intensivos, s cuales 551 eran pacientes con coronavirus o casos sospechosos que necesitaban internación.
En perspectiva
Este total tiene distintas realidades por la cantidad de casos acumulados en los municipios que conforman el AMBA del lado bonaerense.
Mientras que Ituzaingó o Presidente Perón no superan los 500 casos, La Matanza se acerca a los 7000 y cinco partidos del conurbano sur -Quilmes, Lomas de Zamora, Avellaneda, Lanús y Almirante Brown- con General San Martín se encuentran por encima de los 2 mil.
Riera se refirió a los municipios con mayor número de casos, y confirmó que “estos partidos tienen un mayor porcentaje que ronda el 80 u 85%, hay hospitales que reciben dos pacientes más para internación y se completan durante el día”. Además, sostuvo que están trabajando con el sistema integrado “para que puedan derivar pacientes que ya están estabilizados”.
Fernando Corsiglia, médico y presidente de la CICOP (Asociación Sindical de Profesionales de la Salud de la Provincia de Buenos Aires) coincide en este panorama: “Matanza tiene una alta ocupación, el Hospital Mi Pueblo de Varela tiene 6 camas de terapia y están permanentemente ocupadas, el hospital Doctor Erill de Escobar y el Iriarte de Quilmes también están completos”.
Una cuestión de tiempo
Uno de los principales problemas que surgen en la Provincia es la demora en los resultados en los test que se realizan. Hay más de 20 mil personas que se mantienen como casos sospechosos y aún no conocen si poseen o no coronavirus.
Este hecho genera un problema para el sistema sanitario: la necesidad de crear tres sectores distintos para los internados en terapia intensiva.
“Nos pasa que se dificulta la internación porque tenes muchos pacientes positivos y muchos sospechosos. Antes en 24 horas tenías los resultados, ahora pueden pasar varios días. Tenemos un cuello de botella porque necesitamos tres espacios distintos: un lugar para los positivos, uno para los sospechosos y una sala de internación para internados sin coronavirus”, explica Claudio Molinas, licenciado en enfermería y director del Hospital Dr. Arturo Oñativia en Almirante Brown.
Corsiglia advierte que “no todos los lugares cuentan con las mismas condiciones, y las locaciones empiezan a quedar chicos para abordar la situación de los pacientes”.
El detalle
Sobre el incremento de espacios hospitalarios desde la Provincia para afrontar la pandemia, Riera sostiene que se pasaron de “482 UTI para internación de adultos” cuando asumió la gestión para ahora estar “en el orden de las 1400”.
Las camas de terapia intensiva no son el único recurso necesario. Dotarlas con el personal correspondiente es igual de importante que crear los espacios. Se estima que debe haber un médico terapista cada 8 unidades UTI y un enfermero especializado en terapia intensiva cada cuatro.
“No hemos cubierto ni de cerca esa necesidad. Se han armado distintas estrategias con el personal disponible, muy en forma de parche, pero las terapias no pueden funcionar sin los especialistas, es un gran problema ese” sostiene Corsiglia.
Riera responde que “es cierto que hay designaciones en las que aún no se consiguió el profesional. Hoy hay alguien cubriendo, o sea haciendo un día más de su carga laboral. El médico terapista es un recurso crítico, no es un recurso que abunde. Si son 10 camas, las habilitamos con el soporte de un médico clínico”.
Los trabajadores de la salud
La Provincia de Buenos Aires registra 3500 casos de coronavirus entre los trabajadores de la salud en establecimientos públicos y privados de todo el territorio.
Desde Cicop se afirma que este es “el mayor temor, los contagios no solo desde los afectados sino también del contacto entre profesionales, eso nos saca de la atención a los pacientes y nos pone en riesgo de afectar a nuestras familias”.
AÚN NO HAY SUFICIENTE PERSONAL DE SALUD Y EL GOBIERNO PROVINCIAL INCUMPLE… https://t.co/Ah7yVf0Ktw https://t.co/ebjLsAcGPo
— CICOP (@CICOP_ok) June 29, 2020
Otras respuestas
Existe un consenso en que en la actualidad el material de protección es suficiente en los hospitales. Insumos que no fueron suficientes en el inicio de la pandemia, pero que en el último mes aparecieron.
La solución a la escasez de barbijos, delantales y máscaras no es la única respuesta necesaria al problema de contagios dentro de los equipos de salud. Molinas da otra mirada de la situación: “el contagio se da por el agotamiento. Tenes que atender mucha gente, y al cansarte cometes errores. Tengo bastante personal afectado porque al no alcanzarles con un sueldo, tienen hasta tres trabajos. Hay que estar e hisopar treinta personas en un día.”
Los trabajadores de la salud incorporados desde el comienzo de la pandemia en los distintos centros de aislamiento y nuevas terapias aún no han cobrado su salario.
“Muchos profesionales empiezan porque les prometieron una cosa, cuando eso no se cumple dejan de trabajar o dudan de seguir haciéndolo. Ya van cuatro meses sin cobrar.” concluyó Corsiglia.