Inició el juicio oral contra el ex senador y ex gobernador tucumano José Jorge Alperovich, acusado de haber abusado sexualmente de su sobrina cuando era su asistente en el Senado de la Nación. “Quiero la verdad porque esto me mató”, declaró el acusado.
El proceso inició a las 10 de la mañana en la sala de audiencias del Tribunal Oral en lo Criminal N°29, a cargo del juez Juan María Ramos Padilla.
Se espera que en el transcurso del mismo declaren, por lo menos 80 testigos. En caso de que Alperovich sea declarado culpable, podría recibir una pena de 15 años de prisión.
“La prueba va a decir la verdad”, declaró Alperovich al canal TN cuando ingresaba al juicio junto a sus cuatro hijos.
“Con todo el respeto que le tengo al Poder Judicial porque me ajusto a la Justicia y quiero la verdad, le pido que preste atención a las pruebas”, sostuvo al iniciar la audiencia.
“Por consejo de mis abogados me piden que declare después. Sé que todos dirán lo mismo, pero tengo 68 años, once nietos, cuatro hijos, quiero la verdad porque esto me mató”, agregó.
De qué se acusa a Alperovich
Alperovich es juzgado por seis casos de violencia sexual agravada por acceso carnal, y por haber cometido al menos tres hechos de abuso sexual, dos de ellos en grado de tentativa.
La investigación surgió en 2019, cuando la joven decidió hacer la denuncia, aunque el inicio de los presuntos crímenes sexuales fue en 2017.
“Denunciar fue liberarme. Hoy celebro y reconozco en ese difícil proceso el bienestar y la mejoría que cada día experimento y me confirman que callar no es para mí nunca más una opción de vida”, expresó la denunciante en un comunicado. Se trata de su sobrina, cuya identidad será resguardada, que hoy tiene 33 años.
Las pruebas que consideraron en contra de Alperovich fueron las pericias psicológicas, pero sobre todo las declaraciones de la ginecóloga de la denunciante, quien confirmó las lesiones vaginales que descubrió durante una consulta en 2018, fecha coincidente con el hecho más violento relatado por la sobrina del exgobernador tucumano.
De acuerdo a la documentación que obra en el expediente, la denunciante le contó meses más tarde que aquellas lesiones fueron productos de los abusos sexuales provocados por alguien de su entorno familiar y laboral. Específicamente, asegura la profesional, la joven le dijo que el atacante era su jefe.
“Quedó comprobado cómo el imputado, utilizando su fuerza física, ejerciendo abuso intimidatorio de poder y violencia de género, reducía bajo su dominio a la víctima, y la ponía como un mero objeto de satisfacción sexual, de cosificación, sometiéndola de forma violenta, ultrajante y degradante, haciéndolo por el transcurso de un poco más de tres meses”, señaló la acusación fiscal.
En 2022, el juez Osvaldo Rappa procesó a Alperovich por los delitos denunciados y consideró que se cometieron “mediando abuso de poder y autoridad”. Rappa remarcó en su procesamiento que la víctima sufrió un “sometimiento sexual ultrajante”.
“Basta decir simplemente que la persona para la cual trabajaba no se trataba de un desconocido para la víctima, sino una persona pública con poder político que ostentaba en la provincia de Tucumán luego de haber sido gobernador durante tres periodos consecutivos e integrante de su familia, aunque fuese lejano”, agregó el juez.
Alperovich negó haber abusado de su sobrina y no aceptó preguntas en su indagatoria.En tanto, la defensa del acusado alegó que se trataba de una “denuncia falsa orquestada para acabar con su carrera política” y que la denunciante era instrumentalizada por otras personas.
A partir de este lunes se hará una audiencia por semana y, ante la gran cantidad de testigos y los tiempos de la Justicia, el proceso se extendería hasta junio, en principio. Estas audiencias estarán cerradas a la prensa y al público en general, ya que se trata de un caso de abuso sexual. Solo se podrá acceder a los alegatos de apertura, al cierre y a la sentencia.