El fiscal federal Gerardo Pollicita pidió el procesamiento de exdirectivos de Radio y Televisión Argentina (RTA) por los delitos de “defraudación contra la administración pública y negociaciones incompatibles con la función pública” tras retirar más de 11.4 millones de pesos para gastos en una serie de ficción sobre el prócer Manuel Belgrano.
En rigor, Pollicita pidió el procesamiento de Alejandro De la Torre, director adjunto de Administración, Finanzas y Relaciones Comerciales; Claudio Lamalfa, tesorero; Guillermo Siaira, director de Administración, Finanzas y Relaciones Comerciales; Ernesto Molinero, gerente de Producción, y Ariel Berliner, subgerente; y la escenógrafa Adriana Maestri.
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De acuerdo con el fiscal, los citados incurrieron en delitos durante “la puesta en marcha de la producción interna ‘Los amores prohibidos de Belgrano’”, “violando sus deberes y abusando de la confianza que les había sido depositada como funcionarios jerárquicos de RTA SE”, “mediante la extracción en efectivo de sumas de dinero de la cuenta bancaria de la sociedad y su posterior utilización, eludiendo los pertinentes mecanismos de control y la normativa que reglamenta el accionar hacia dentro de la misma”.
A su vez, el fiscal señala que “la conducta desarrollada por los nombrados estuvo orientada a procurarse el manejo de dinero en efectivo por fuera de los límites previsto para este tipo de operaciones en el ámbito estatal, con miras a disponer arbitrariamente del mismo”, y así, “perjudicaron a las arcas públicas asignadas a RTA, en un claro beneficio propio y de terceras personas; motivo por el cual se solicitará que decreten sus procesamientos”.
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En su imputación, Pollicita excluye a Rosario Lufrano, la titular de RTA; a su ex número dos, Eliseo Álvarez; y al directorio de la empresa pública. De hecho, Lufrano fue quien formuló la denuncia penal.