El gobierno se enfrenta a una encrucijada legislativa crucial, evaluando la posibilidad de extender las sesiones extraordinarias más allá de su fecha límite el próximo jueves 15 de febrero. La decisión respondería a la necesidad de abordar normativas relacionadas con la prevención del lavado de dinero, el financiamiento del terrorismo y la proliferación de armas de destrucción masiva.
El proyecto en cuestión logró el respaldo de las comisiones de Justicia y Asuntos Penales, así como de Presupuesto y Hacienda del Senado, destacando el terreno político significativo para la vicepresidenta de la Nación, Victoria Villarruel. La iniciativa, impulsada también por el ministro de Justicia, Mariano Cúneo Libarona, busca mejorar sustancialmente la normativa vigente en estas áreas sensibles.
Esta propuesta, previamente aprobada por la Cámara de Diputados en abril de 2023, es parte de un acuerdo más amplio entre Argentina y el Fondo Monetario Internacional (FMI), e incorpora recomendaciones del Grupo de Acción Financiera Internacional (GAFI). La inminente visita del GAFI a Argentina, programada para finales de febrero y principios de marzo, agrega presión para evitar la inclusión del país en la lista gris del organismo internacional.
Sin embargo, la extensión de las sesiones extraordinarias no está exenta de controversia, especialmente tras el reciente fracaso de la ley ómnibus. Este revés dejó al Gobierno en una situación política delicada, generando resistencia en algunos sectores legislativos y de la sociedad civil. La denuncia presentada por el bloque de Unión por la Patria en el Senado contra Victoria Villarruel, presidenta de la Cámara de Senadores, por no convocar a una sesión especial para tratar un Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) del Gobierno de La Libertad Avanza (LLA), refleja las tensiones y desafíos actuales.
En este contexto, figuras prominentes como Javier Milei continúan ejerciendo presión desde el ámbito político. Milei, quien recientemente regresó de una gira en Italia e Israel, sigue utilizando plataformas como X (ex Twitter) para enviar mensajes a la dirigencia y mantenerse activo en el debate político nacional.
La urgencia de la situación y la necesidad de cumplir con los compromisos internacionales subrayan la importancia de encontrar soluciones efectivas y consensuadas en el ámbito legislativo, en medio de un panorama político cada vez más complejo.
